Greta Thunberg y los dirigentes del movimiento juvenil contra el cambio climático alrededor del mundo llamaron a los adultos de todas las naciones a adherir a una paralización global este 20 de septiembre.
Los activistas están pidiendo a los ciudadanos a faltar a sus trabajos justo antes de una cumbre crucial de la ONU, donde se apurará a las naciones a adoptar ambiciones mucho más fuertes para combatir la emergencia climática.
El llamado fue hecho mientras los jóvenes se preparaban para lo que los organizadores han declarado será una de las marchas estudiantiles más grandes hecha por Fridays For Future, la cual espera 1.594 ciudades y pueblos en más de 118 países.
Thunberg, la adolescente sueca que inició un movimiento global gracias a una protesta realizada en agosto del 2018 y otros 44 compañeros protestantes de alrededor del globo, llamaron a una movilización general en un articulo publicado en The Guardian.
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“Estamos pidiendo que los adultos que caminen junto a nosotros. Hoy, muchos de nuestros padres están discutiendo si nuestras notas son buenas o malas, o sobre una nueva dieta o el final de Game of Thrones, mientras el planeta se quema“, afirman en el comunicado.
“Pero para cambiar todo, necesitamos a todos. Es el tiempo para que todos nosotros desatemos una resistencia masiva. Si la mayoría exige un cambio, tenemos una oportunidad“, agregan.
La movilización global está planeada para iniciar una semana de acción contra el cambio climático alrededor del mundo.
“Salgan de su zona de confort para hacer que esto se transforme en un momento coyuntural en la historia. Esto se trata de cruzar las lineas, es revelarse de todas las maneras en que uno pueda revelarse“.
Los jóvenes protestantes están demandando que los gobiernos provean inmediatamente un protocolo seguro para mantener al calentamiento global en un máximo de 1.5°C.
Los científicos del mundo afirman que se necesita de forma urgente un agudo recorte en las emisiones de carbono para hacer que caigan en un 50% para el 2030 y así evitar peores sequías, inundaciones, olas de calor extremas y pobreza para miles de millones de personas. Aún así, las emisiones siguen aumentando.
La vida salvaje también está siendo aniquilada por la actividad humana, con las poblaciones de animales en una picada de un 60% en promedio desde 1970. La sociedad humana está amenazada por el declive de los sistemas que apoyan y sostienen la vida natural.
De acuerdo a un reporte de referencia publicado a principio de mayo de 2019, la mitad de los ecosistemas del mundo están destruidos y más de un millón de especies están en riesgo de extinción.
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Algunos adultos ya se han unido a las jóvenes movilizaciones, con miles de trabajadores protestando a lo largo de Bélgica en marzo, junto con una delegación de la Federación Europea de Servicios Públicos.
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