Por estos días la capacidad demostrada por nuestros surfistas nos ha llenado de orgullo, especialmente después que las imágenes de uno de los principales exponentes de este deporte en Chile, Ramón Navarro sobre una ola gigante y que recorrió el mundo.
Todos ellos tienen a nuestro mar como uno de los mejores campos de entrenamiento, olas enormes que no solo hacen de nuestras costas un paraíso para los surfistas, sino también representan un patrimonio estratégico, ya que la fuerza del mar puede entregarnos la energía que Chile requiere para el futuro.
Pichilemu es uno de los destinos favoritos de los surfistas que andan en busca de una ola gigante, el mismo oleaje que nos otorga infinitas posibilidades para generar una matriz de generación de energía eléctrica.
Andrés Fernández, jefe de docencia de ingeniería en construcción de la PUCV, afirmó que “si pudiéramos extraer del mar es más o menos seis o siete veces la potencia que hay instalada en Chile”, indicó.
El docente, junto a un grupo de investigadores, está a punto de patentar un sistema que permite extraer energía de las olas.
“En Chile, especialmente en Arica donde hay menos energía son 20 kilowatts por metro de ola y en el sur de Chile es mucho más de 100”, afirmó sobre el potencial que tiene el país en este tipo de energía.
Martes / 22:30 / CNN Chile
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