Cada vez se instala más la idea de que la salud humana y animal están muy interconectadas. Lo vemos con lo que ocurre con esta pandemia por el nuevo coronavirus, es una reflexión que ha surgido en el ámbito de la salud pública desde hace ya varias décadas. Ha aparecido también el concepto de la salud planetaria durante los últimos años en relación, por ejemplo, al cambio climático.
Para conocer más sobre estos aspectos que hoy afectan a todo el planeta, Humberto Sichel conversó con Cristóbal Cuadrado doctor en Salud Pública, académico U. de Chile y secretario técnico del Departamento de Políticas de Salud y Estudios del Colegio Médico.
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“Sabemos que cada vez estamos más expuestos a tener desafíos globales como el que estamos enfrentando hoy. Ya sea por el cambio climático, en el cual va a llevar a nuevos patrones de enfermedades infecciosas que han estado erradicadas en algunos lugares y que van a empezar a ser importantes en países que creían haberlo superado”, señaló Cuadrado.
Por otro lado, comentó que siempre existe la posibilidad de pandemias, como la que ocurre ahora del nuevo coronavirus, en un mundo en donde hay creciente una sobrepoblación, donde además hay una mayor globalización y conexión, las epidemias se movilizan mucho más rápido que en siglos pasados.
A su vez, se refirió a la falta de trabajo colaborativo en América Latina en cuanto a medicina y sistemas de salud, que operen en coordinación con organismos multilaterales como la Organización Mundial de la Salud (OMS). “Uno esperaría que existan iniciativas de colaboración más fuertes entre las regiones. En Europa eso es muy claro, en los sistemas de salud en la Unión Europea colaboran bastante entre ellos, pero en otras regiones como Latinoamérica, no existen realmente activos de colaboración tan fuertes entre los sistemas de salud de cada país“.
Cambio de modelo
Además, cuestionó la forma en la que ha venido operando algunos organismos internacionales como la OMS. “Yo creo que el modelo actual de organización, tiene que ser corregido. Un organismo internacional tiene que lograr balancear los intereses de toda la población del mundo y no estar capturado por algunos países que tienen capacidad de veto y capacidad de financiar más activamente a Naciones Unidas. Lo primero, creo yo, es que deberíamos acabar con el origen de la ONU en el sentido que se generan por la geopolítica de mediados del siglo XX, después de la II Guerra Mundial, los poderes que estaban presente en ese momento, son los que finalmente tienen el poder de veto y son los que ponen las normas en la OMS”.
También criticó la forma en la que se toman decisiones y se aplican medidas desde estos organismos que, a su juicio, acentúan las desigualdades, en tanto le dan mayor poder de decisión a las economías más poderosas como EE.UU. y China, mientras que otros países con gran población como India, pero con economías más deprimidas, quedan subrepresentados.
“Probablemente esa sea una de las primeras cosas que tengamos que resolver, cómo damos más legitimidad a las decisiones con una representatividad más concreta a que los estados tengan un poder que sea equivalente al tamaño de su población, al menos”, añadió.
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Señaló que “una pandemia no se puede enfrentar con lógicas de mercado” y se deben modificar esquemas capitalistas cuando se trata de la salud. “Eso lo hemos visto en nuestro país también. O sea, las lógicas de mercado necesitan acabar. Los exámenes de diagnósticos tienen que ser gratuitos, la lógica de que alguien tiene que pagar por ello no tiene ningún sentido, porque es un bien público el que se haga un test. Por lo tanto, está muy bien en plantearse que no es una forma con la cual uno puede resolver o enfrentar una pandemia”, sentenció.
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