En una conversación exclusiva con Futuro 360, Pippa Ehrlich, codirectora del aclamado documental “Mi Maestro El Pulpo”, reveló las profundas reflexiones que guiaron su trabajo tras las cámaras, resaltó la importancia crucial de preservar la biodiversidad y reconectar con la naturaleza.
Para Ehrlich, el pulpo, una criatura tan distinta a los humanos en términos evolutivos, representa un recordatorio de que todas las formas de vida en el planeta tienen historias únicas y un deseo innato de vivir y reproducirse. “Cada cosa en este planeta tiene una historia”, afirma Ehrlich, subrayando la riqueza y complejidad de la vida marina.
La cineasta y periodista lamenta la creciente desconexión de la humanidad con la naturaleza, señalando que durante la mayor parte de la historia humana, nuestra supervivencia dependía de nuestra comprensión y relación con el mundo natural. Esta desconexión, argumenta, “ha llevado a una jerarquía arrogante y destructiva que amenaza la vida en la Tierra“.
Al explorar el mundo de los pulpos, Ehrlich destacó su inteligencia y capacidad de adaptación, que les ha permitido desarrollar formas innovadoras de sobrevivir en su entorno marino. Esta adaptabilidad, sugiere, “ofrece lecciones valiosas para los seres humanos, quienes pueden aprender a valorar más la vida salvaje y a preocuparse por las generaciones futuras”.
Ehrlich enfatizó el papel crucial de la ciencia en la comprensión y preservación de la biodiversidad, señalando que los científicos han advertido sobre el cambio climático y la pérdida de biodiversidad durante décadas. Sin embargo, lamentó que el mensaje no se haya transmitido adecuadamente al público en general.
Para la codirectora del ganador del Oscar a mejor documental del 2021, la biodiversidad es el sistema inmunológico del planeta, y su pérdida representa una amenaza grave para la salud y el bienestar de todos los seres vivos. Asimismo, destacó la importancia crítica de los océanos, que generan gran parte del oxígeno que respiramos y cuya salud está en peligro debido al cambio climático.
En última instancia, Ehrlich abogó por una mayor conexión con la naturaleza y un mayor aprecio por la vida en todas sus formas, recordando la existencia de la belleza y el misterio de la vida en la Tierra, y la responsabilidad que todos tenemos de protegerla para las generaciones futuras.
Deja tu comentario