Todos los hombres creen que pueden aterrizar un avión: ¿Por qué ocurre esto?

Imagina que te encuentras en pleno vuelo a más de 10 mil metros de altura y ocurre una emergencia que ha provocado que tanto el piloto como copiloto no puedan seguir maniobrando al avión. ¿Eres capaz de pilotear y aterrizarlo de forma segura?

Esta interrogante fue la que se llenó de videos en redes sociales en las que demostraba que la gran mayoría de los hombres, pese a ser inexpertos en esta materia, afirmaban que lograrían realizar esta maniobra de forma exitosa.

@ivy_.rg CONTEXTO: me salio un tiktok (no se de quien era) que decía que si le preguntas a un hombre si puede pilotear un avión, seguro dice que si #allmencanlandplanes #planelandingmoment #meme #romanempiretrend #menlandingairplanes #menlandingplanes #foryou #foryoupage #parati #pareja ♬ original sound – Ivyy

Este nuevo Roman Empire, ha generado un debate inusual en torno a la confianza másculina, ¿por qué algunos hombres creen que son capaces de aterrizar un avión en momentos críticos? Para conocer más sobre este fenómeno desde una perspectiva psicológica, en Futuro 360 conversamos con el psicólogo Samuel Fernández.

Diversidad de respuestas masculinas

Fernández señala que las respuestas de los hombres pueden variar debido a una serie de factores psicológicos, emocionales e históricos.

El experto sugiere que estas respuestas podrían reflejar roles sociales históricos atribuidos a los hombres, especialmente en culturas con estructuras patriarcales. A medida que la sociedad evoluciona hacia la igualdad de género, los roles tradicionales de protección masculina están siendo cuestionados y redefinidos en las dinámicas de pareja contemporáneas.

Un segmento considerable de la población masculina podría expresar confianza en sus habilidades para aterrizar un avión con el propósito de transmitir seguridad a sus parejas, un rol protector tradicionalmente asociado al género masculino.

Otro grupo podría ser víctima de una sobreestimación de sus habilidades, una sobreconfianza que podría provenir de un sesgo cognitivo, llevándolos a creer que pueden enfrentar tareas complejas sin capacitación adecuada.

Además, la ingenuidad sobre la complejidad del pilotaje podría llevar a una percepción simplificada de la tarea, equiparándola a estacionar un automóvil con una dosis adicional de adrenalina.

Videojuegos y realidad

La discusión se amplía al papel de los videojuegos en la formación de estas creencias. Aunque simuladores de vuelo como Microsoft Flight Simulator permiten aprender conceptos básicos, Fernández destaca que la experiencia de una situación de emergencia real no puede replicarse en un juego.

La confianza generada por los videojuegos puede ser temporal, pero la mayoría de las personas entienden la diferencia entre la ficción del juego y la realidad.

Perspectivas futuras

Fernández concluye que la creencia de que se puede aterrizar un avión en una emergencia refleja más el rol histórico asignado al hombre que la sociedad en sí misma. Aunque la respuesta puede tener matices, es esencial no reducir el análisis de la sociedad a esta única situación.

Se plantea la posibilidad de futuras investigaciones que pongan a prueba a personas con experiencia solo en simuladores de vuelo en situaciones reales, lo que podría arrojar luz sobre la efectividad de la formación virtual en emergencias aéreas.

En última instancia, la confianza masculina en estas situaciones, amplificada por eventos virales como Roman Empire, despierta importantes reflexiones sobre la evolución de los roles de género y la influencia de los medios virtuales en la percepción de habilidades en situaciones críticas.