Bobi, el perro que se llevó el Récord Guinness del “más viejo del mundo y de la historia” a comienzos de este año, falleció a sus 31 años y 165 días. El can que nació en 1992, duplicó la expectativa de vida de 14 años de su raza rafeiro do Alentejo, dejando este mundo tranquilamente en su hogar ubicado en el pueblo de Conqueiros, Portugal.
31 años de Bobi
Según comentó el dueño de Bobi, Leonel Costa, el fiel compañero comenzó su vida con la pata izquierda, siendo el único sobreviviente de una camada de perros no deseados por sus dueños. “Desafortunadamente, en esos tiempos la gente mayor veía matar perros como algo normal. Así que los enterraban en hoyos para que no sobrevivieran si es que no los querían“, afirmó Leonel.
Afortunadamente, Bobi logró escaparse y esconderse entre troncos. Fue ahí que Costa y sus hermanos los encontraron, cuidándolo en secreto hasta que sus padres le permitieron quedarse con el perro.
Según reportó IFLScience, la longevidad correría en la sangre de Bobi, ya que su madre vivió hasta los 18 años y algunos de sus hermanos que nacieron antes llegaron hasta los 22 años. Aun así, el fiel compañero sorprendió al mundo científico, logrando vivir mucho más que cualquier otro perro en la historia registrada.
La edad de Bobi ha sido confirmada por el Servicio Médico Veterinario del Municipio de Leiria y SIAC, una base de datos de mascotas autorizada por el gobierno portugués.
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