En 1994, un equipo de paleontólogos de la Universidad de Harvard se encontraba excavando en Groenlandia cuando encontraron dos cráneos bien conservados. Se pensó originalmente que se trataba de un espécimen de los Plateosaurus, un conocido dinosaurio de cuello largo que vivió en Alemania, Francia y Suiza durante el período Triásico, sin embargo, luego de 27 años se viene a conocer realmente a qué especie corresponde.
El equipo internacional de investigadores de Portugal, Dinamarca, Alemania y la Universidad Martin Luther Halle-Wittenberg (MLU) decidió realizar una micro-tomografía computarizada de estos huesos para crear unos modelos digitales en 3D de sus estructuras internas.
“La anatomía de los dos cráneos es única en muchos aspectos, por ejemplo, en la forma y las proporciones de los huesos. Estos especímenes ciertamente pertenecen a una nueva especie“, manifestó Victor Beccari, autor principal de la investigación en un comunicado.
Los análisis arrojaron que ambos cráneos provienen de una individuo juvenil y otro casi adulto y datan de 214 millones de años. Además, se trata de una nueva especie de dinosaurio que tiene características similares con dinosaurios encontrados en Brasil: Macrocollum y Unaysaurus, casi 15 millones de años más antiguos.
Esta nueva especie fue bautizada como Issi saaneq, en homenaje a la lengua unit de Groenlandia y significa “hueso frío”.
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Asimismo, se indica que forma parte del grupo de los plateosáuridos (bípedos relativamente elegantes que alcanzaban longitudes de 3 a 10 metros) pero es predecesor de los saurópodos.
Este nuevo hallazgo publicado en la revista Diversity es la primera evidencia de una especie de dinosaurio groenlandesa diferente, la cual permite comprender de mejor manera las vías evolutivas y la línea de tiempo de este icónico grupo de saurópodos.
Una vez finalizado el trabajo científico, los fósiles serán enviados al Museo de Historial Natural de Dinamarca.
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