Científicos cultivan una piel de hongo asesino en modelo robótico inspirado en “Terminator”

En un emocionante avance que podría transformar la forma en que interactuamos con la tecnología, un equipo de investigadores ha creado una piel viva hecha de un hongo, implantada en la icónica película Terminator del director James Cameron, lanzada en 1984.

Esta piel de hongo, que puede sentir la luz y el tacto, promete abrir nuevas posibilidades en el mundo de los sensores sostenibles y biodegradables para dispositivos electrónicos.

Los sensores electrónicos tradicionales, fabricados principalmente con silicona, han sido complejos de producir y limitados en su capacidad para detectar múltiples estímulos simultáneamente. Sin embargo, el equipo liderado por Antoni Gandia de la Universidad Politécnica de Valencia en España y Andrew Adamatzky de la Universidad del Oeste de Inglaterra en el Reino Unido se inspiró en la versatilidad de los organismos vivos, como los hongos.

En lugar de silicona, cultivaron una especie de hongo llamada Ganoderma sésil sobre un modelo Terminator (similar a Terminator T-800, interpretado por Arnold Schwarzenegg) utilizando agar para estimular su crecimiento.

Sorprendentemente, en solo cinco días, el hongo cubrió completamente la superficie del modelo, creando una piel orgánica completamente funcional. Cuando se colocaron electrodos en el modelo, el hongo demostró ser sensible a la luz y al tacto, generando distintas señales eléctricas en respuesta.

Este logro abre la puerta a una amplia gama de aplicaciones potenciales. Desde edificios que puedan regular su temperatura de manera natural hasta dispositivos portátiles personalizados que monitorean el cuerpo de manera más precisa, la piel de hongo podría convertirse en una herramienta revolucionaria. Gandia señala que “el micelio está vivo y responde. Podemos pensar en ello como un aliado”.

Este emocionante avance en la tecnología de sensores nos recuerda que, a veces, la naturaleza misma puede proporcionarnos soluciones sorprendentes. En un futuro no muy lejano, podríamos ver dispositivos electrónicos equipados con esta piel de hongo, brindando una forma más sostenible y versátil de interactuar con el mundo que nos rodea. La ciencia ficción de Terminator está un paso más cerca de convertirse en realidad.

La investigación fue publicada en la revista Research Square.