A partir del 1 de enero de 2024, el gobierno holandés implementará una prohibición de teléfonos móviles, tablets y relojes inteligentes en las aulas.

La decisión se basa en la preocupación por los bajos rendimientos y la falta de concentración de los niños y jóvenes holandeses debido a los teléfonos celulares. Los padres y profesores están de acuerdo con esta medida, ya que muchos han observado cómo sus hijos prestan más atención a sus celulares que a las explicaciones de los académicos.

El gobierno considera que los dispositivos son una distracción comprobada por investigaciones científicas y busca proteger a los estudiantes de esta interferencia. Si bien aún no es una prohibición formal, el gobierno analizará los avances antes de implementarla.

Si bien se permitirá el uso de estos dispositivos en casos específicos, como lecciones de habilidades digitales o necesidades médicas, el ministro de Educación, Robbert Dijkgraaf, enfatizó que esto será mediante un permiso y espera que la medida genere una “transformación cultural” en las escuelas y fomente un mejor ambiente de aprendizaje.

Se está solicitando a las autoridades escolares que establezcan reglas internas en colaboración con maestros, padres y alumnos antes de octubre. Esta prohibición sigue los pasos de Francia, que implementó una medida similar en 2018 para mejorar el enfoque y prevenir el acoso en línea en las escuelas primarias y secundarias.

La efectividad de la prohibición en las escuelas holandesas será evaluada a través de resultados y mediciones para determinar si los dispositivos móviles continuarán siendo permitidos en las aulas de clases o serán definitivamente prohibidos.

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