Crédito: Botto

Un artista puede esclavizarse por semanas o meses frente a su lienzo para desarrollar una obra de arte. A diferencia de ellos, la inteligencia artificial lo puede lograr en minutos.

Ahora, el artista de inteligencia artificial Botto es capaz de producir obras a partir del criterio de usuarios repartidos en el mundo

Esto quedó absolutamente claro cuando hace unos días, seis de sus piezas NFT fueron subastadas y generaron una ganancia promedio de US$ 1,3 millones.

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Si bien se trata de una tecnología de IA, el dinero obtenido es utilizado para incentivar este proyecto y el proceso de votación de un equipo humano.

Pero, ¿cómo se producen las obras?

Para generar imágenes, Botto genera una cadena aleatoria de palabras y oraciones que alimentan a Vector Quantized Generative Adversarial Network (VQGAN).

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Luego, un software llamado Contrastive Language-Image Preciosa-tRAINING (CLIP) elige los parámetros que den una cierta puntuación y pueden generar un título que resuene con la imagen.

En relación a la descripción de la obra, Botto utiliza a GPT-3 -un poderoso generador de lenguaje natural de OpenAI- que produce entre 5 a 10 líneas de poesía abstracta.

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