(CNN) – Astrónomos descubrieron evidencia adicional de que una de las lunas más pequeñas de Saturno, llamada Mimas, esconde un océano global debajo de su superficie helada. Desarrollar argumentos más sólidos a favor de la presencia de agua, esencial para la vida tal como la conocemos, podría ayudar a los científicos a comprender mejor dónde buscar mundos habitables en la vasta extensión del espacio profundo.
Anteriormente, los científicos pensaban que Mimas era solo un gran trozo de hielo antes de que la misión Cassini de la NASA estudiara Saturno, entre 2004 y 2017, y algunas de sus 146 lunas que orbitan el planeta anillado.
Descubierto en 1789 por el astrónomo inglés William Herschel como un pequeño punto cerca Saturno, Mimas, fue fotografiado por primera vez desde el espacio por las sondas Voyager en 1980. Los cráteres cubren la superficie de Mimas, pero el más grande tiene unos 130 kilómetros de diámetro y hace que la luna se parezca a la Estrella de la Muerte de la saga de películas “Star Wars”.
Los datos recopilados durante los sobrevuelos de Cassini a Mimas intrigaron a los astrónomos. La luna tarda un poco más de 22 horas en orbitar Saturno y está a solo 186.000 kilómetros del planeta. Los datos de Cassini mostraron que la rotación y el movimiento orbital de Mimas experimentaron cambios provocados por el interior de la luna.
Un equipo de investigadores europeos determinó en 2014 que un núcleo rígido, alargado y rocoso o un océano subterráneo causaban la rotación y el movimiento de la luna.
Para dar seguimiento al estudio anterior, el astrónomo Dr. Valéry Lainey y sus colegas del Observatorio de París analizaron los datos del movimiento orbital para ver qué escenario era más probable. Los hallazgos fueron publicados este miércoles en la revista Nature.
El equipo determinó que el giro y el movimiento orbital de la luna no coincidían con las observaciones de Cassini si Mimas tenía un núcleo rocoso en forma de panqueque. En cambio, la evolución de la órbita de Mimas a lo largo del tiempo sugirió que un océano interno ha dado forma a su movimiento, dijo Lainey.
Este descubrimiento añade a Mimas a un exclusivo club de lunas con océanos internos, incluyendo Enceladus y Europa, pero con una diferencia única: su océano es notablemente joven, estimado en sólo 5 (millones) a 15 millones de años, dijo el coautor del estudio Dr. Nick Cooper, investigador honorario de la unidad de astronomía de la Escuela de Ciencias Físicas y Químicas de la Universidad Queen Mary de Londres, en un comunicado.
Vieja superficie, océano joven
El equipo de investigación determinó el origen y la edad del océano Mimas al estudiar cómo la luna, de aproximadamente 400 kilómetros de diámetro, respondía a las fuerzas gravitacionales que Saturno ejeraba en ella.
La calefacción interna debe provenir de las mareas levantadas por Saturno en Mimas, dijo Lainey. Estos efectos de las mareas han inducido fricción dentro del satélite, proporcionando calor.
El equipo sospecha que el océano mide unos 20 kilómetros a 30 kilómetros de profundidad bajo la capa de hielo de la luna. Con el océano tan joven, astronómicamente hablando, no habría señales externas de actividad en la superficie para implicar la presencia de un océano subterráneo.
Los cráteres a través de Mimas actúan como arrugantas reveladoras, lo que sugiere que tiene una superficie vieja. Pero Saturno Enceladus parece más joven porque los géiseres activos han contribuido a resguardar, o depositar de nuevo material fresco en esa superficie de la luna.
El océano sigue evolucionando, por lo que Mimas puede ofrecer una ventana única a los procesos detrás de cómo se han formado los océanos subterráneos en otras lunas heladas, dijeron los investigadores.
Una mirada más cercana a los mundos oceánicos
El descubrimiento podría cambiar la forma en que los astrónomos piensan sobre las lunas en todo nuestro sistema solar.
Si Mimas esconde un océano global, esto significa que el agua líquida podría estar casi en cualquier lugar, dijo Lainey. Ya tenemos candidatos serios para los océanos globales (en la luna como) Callisto, Dione y Tritón.
En 2017, la NASA anunció que los mundos oceánicos podrían ser los lugares más probables de encontrar vida más allá de la Tierra, y misiones como la Agencia Espacial Europea de Jugo y Dragonflyla nave espacial de la NASA de la NASA, investigarán la posible habitabilidad de las lunas de Júpiter Europa, Ganímedes y Callisto y la luna de Saturno Titan.
La existencia de un océano de agua líquida recientemente formado convierte a Mimas en una candidata principal para estudiar, para los investigadores que investigan el origen de la vida, dijo Cooper.
Puede ser el momento de observar otras lunas aparentemente tranquilas a través del sistema solar que podrían estar ocultando condiciones que pueden soportar la vida, dijeron los autores del estudio.
Los hallazgos de lancha y colegas motivarán un examen exhaustivo de las lunas heladas de tamaño medio en todo el Sistema Solar, escribieron los doctores. Matija Euk y Alyssa Rose Rhoden en un artículo que acompañó el estudio. Euk es un científico investigador del Instituto SETI en California, y Rhoden es un científico principal de la Dirección de Ciencias Planetarias del Southwest Research Institute en Colorado.
Ninguno de los dos autores estuvo involucrado en el estudio, pero Rhoden ha sido autor de una investigación sobre el potencial de un océano de “estalto”, en Mimas.
Básicamente, la diferencia entre nuestro documento de 2022 y este nuevo papel es que encontramos que un océano no podía ser descartado por la geología de Mimas, mientras que en realidad están detectando la firma del océano dentro de la órbita de Mimasá, dijo Rhoden. Es la evidencia más fuerte que tenemos, hasta ahora, de que Mimas realmente tiene un océano hoy.
Desde el informe de 2022, Rhoden y su grupo de investigación han continuado su estudio de Mimas, y están de acuerdo con la conclusión del nuevo estudio sobre la edad relativamente joven del océano de la luna.
Las mimas ciertamente demuestran que las lunas con superficies viejas pueden estar escondiendo océanos jóvenes, lo cual es bastante emocionante. Creo que podemos especular sobre si las lunas han desarrollado océanos mucho más recientemente de lo que a menudo suponemos.
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