Algunas personas desean que las cenizas de sus familiares fallecidos sean depositadas en lugares especiales y con significado. Tal fue el caso de uno de los personajes más queridos de Star Trek, cuyos restos terminaron en la Estación Espacial Internacional (EEI), aunque de manera oculta.
La información permaneció en secreto durante 12 años, hasta que el Times de Londres dio a conocer la noticia. Esta historia comenzó en 2008, cuando Richard Garriott, una de las primeras personas en viajar como turista a la EEI, llevó consigo la curiosa encomienda.
Lee también: Importante logro: Astronautas de la Estación Espacial Internacional cosecharon sus primeros rábanos
Las cenizas pertenecen a James Doohan, conocido por su papel de Montgomery “Scotty” Scott en la popular serie de televisión Star Trek. La familia deseaba que sus restos llegaran a la EEI, pero las solicitudes oficiales para llevar esto a cabo fueron rechazadas.
Ahí es cuando entró a escena Garriott, quien en su viaje a la estación llevó de contrabando una foto de Doohan junto a un poco de sus cenizas. Al llegar, las escondió debajo del piso del módulo Columbus, donde permanecerían hasta el día de hoy.
“Fue completamente clandestino (…) su familia estaba muy contenta de que las cenizas llegaran allí, pero a todos nos decepcionó que no pudiéramos hablar de ello públicamente durante tanto tiempo. Ahora ha pasado suficiente tiempo para que podamos”, señaló al medio británico.
Lee también: Ocho patas en órbita: Astronautas experimentan con arañas al interior de la Estación Espacial Internacional
El Times detalló que los restos de Scotty, quien desempeñó el papel de ingeniero en jefe del USS Enterprise en Star Trek, ya han orbitado la Tierra más de 70 mil veces y viajado casi 1.700 millones de millas a través del espacio.
“Lo que Garriott hizo fue conmovedor, significó mucho para mí, mucho para mi familia y habría significado mucho para mi padre”, añadió el hijo de Doohan, Chris.
Martes / 22:30 / CNN Chile
Deja tu comentario