La misión Solar Orbiter detecta una eyección de masa coronal mientras pasaba detrás del sol

(CNN) – Un feliz accidente ha provocado que la misión Solar Orbiter espíe erupciones del sol. Estas erupciones, llamadas eyecciones de masa coronal, expulsan partículas solares a través del sistema solar y tienen el potencial de interrumpir la tecnología si llegan a la Tierra.

Estas erupciones fueron detectadas por múltiples instrumentos en la nave espacial durante un sobrevuelo cercano del sol, que se llama perihelio, el 10 de febrero. Este sobrevuelo llevó a la nave espacial a 74.8 millones de kilómetros del sol, eso es la mitad de la distancia entre la estrella masiva y la Tierra.

Esta es la primera vez que el orbitador ha sido testigo de tales erupciones.

Speaking of #CMEs, the first @ESASolarOrbiter movies showing #CMEs, or coronal mass ejections, including during the spacecraft’s February perihelion pass, released today 👉 https://t.co/jYBGMZx3bJ #WeAreAllSolarOrbiters pic.twitter.com/JoQtsBCbu9

— ESA (@esa) May 17, 2021

La misión, que se lanzó en febrero de 2020, es una colaboración entre la NASA y la Agencia Espacial Europea. Aunque la principal agenda científica de Solar Orbiter no comienza hasta noviembre, para estudiar los polos norte y sur del sol, ya ha pasado de cerca por el sol que capturó las imágenes más cercanas jamás tomadas de nuestra estrella y reveló “fogatas” cerca de la superficie de su estrella.

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Actualmente, la nave espacial se encuentra en su fase de crucero, lo que permite la calibración de algunos de los 10 instrumentos a bordo. Durante la fase de crucero, cuatro de sus instrumentos están en funcionamiento y lo han estado desde su lanzamiento. El sobrevuelo de febrero brindó a los equipos de la misión la oportunidad de realizar observaciones y probar algunos de sus instrumentos.

Una vez que la misión científica comience en serio, los 10 instrumentos trabajarán juntos para crear observaciones conjuntas de nuestro sol.

Este sobrevuelo fue único en el sentido de que la nave espacial estaba realmente detrás del sol desde la perspectiva de la Tierra, lo que provocó un retraso en las tasas de transferencia de datos. Esto retrasó la entrega de los datos a los científicos de la misión, por lo que algunos de ellos aún se están analizando.

El equipo de la misión no esperaba que Solar Orbiter registrara ningún dato a medida que pasaba detrás del sol y giraba en órbita del otro lado, por lo que capturar estas erupciones fue un feliz accidente.

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Hasta ahora, los datos cuentan una historia interesante. Durante el sobrevuelo, tres de los instrumentos de la nave registraron un par de eyecciones de masa coronal. Estas herramientas incluyeron el generador de imágenes ultravioleta extremo (EUI), el generador de imágenes heliosférico (SoloHI) y el coronógrafo Metis.

Mientras tanto, otras naves espaciales como Proba-2 de la ESA y el Observatorio Solar y Heliosférico de la ESA / NASA presenciaron estos eventos desde el lado del sol que mira hacia la Tierra. Una misión de la NASA llamada STEREO-A también espió el evento desde una perspectiva diferente.

Los instrumentos de Solar Orbiter, así como los datos recopilados por las otras misiones, muestran una repentina erupción de partículas del sol, que se produce en conjunto con una explosión visiblemente brillante.

El instrumento Metis de Solar Orbiter bloquea la luz brillante de la superficie del sol, por lo que la erupción de partículas se ve en luz visible (izquierda) y luz ultravioleta. Crédito: NASA/ESA

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Seguimiento del clima espacial

Comprender las eyecciones de masa coronal es clave para decodificar el clima espacial, que es la actividad del sol que puede causar impactos en la Tierra. Estos pueden afectar a los astronautas de la estación espacial en órbita terrestre baja, así como a los satélites que apoyan las comunicaciones globales. Cuanto más aprendan los investigadores sobre estas erupciones, mejor podrán rastrear y anticipar la actividad solar.

Mientras que las naves espaciales de la NASA han estado observando eyecciones de masa coronal durante años, Solar Orbiter ofrece el mejor aspecto hasta ahora.

“Nos hemos dado cuenta en los últimos 25 años suceden muchas cosas en una eyección de masa coronal entre la superficie del Sol y la Tierra”, dijo Robin Colaninno, investigador principal de SoloHI en el Laboratorio de Investigación Naval de EE. UU. En Washington. DC, en un comunicado. “Esperamos obtener imágenes con una resolución mucho mejor de todas estas salidas al estar más cerca del Sol“.

Solar Orbiter es la primera misión que proporcionará imágenes de los polos norte y sur del sol. Tener una comprensión visual de los polos del sol es importante porque puede proporcionar más información sobre el poderoso campo magnético del sol y cómo afecta a la Tierra.

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Los instrumentos de Solar Orbiter pueden capturar observaciones de la corona solar (que es su atmósfera), los polos y el disco solar. Las herramientas también pueden medir los campos magnéticos del sol y el viento solar, o la corriente energizada de partículas emitidas por el sol que atraviesan nuestro sistema solar.

Comprender el campo magnético del sol y el viento solar es clave porque contribuyen al clima espacial. El campo magnético del sol es tan masivo que se extiende más allá de Plutón, proporcionando un camino para que el viento solar viaje directamente a través del sistema solar.

La misión trabajará en conjunto con la sonda solar Parker de la NASA, que actualmente está orbitando el sol en una misión de siete años y acaba de completar su cuarto acercamiento cercano a la estrella. Se lanzó en agosto de 2018 y eventualmente se acercará a 4 millones de millas del sol, lo más cerca que una nave espacial ha volado por nuestra estrella.

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La sonda Parker está “rastreando el flujo de energía que calienta y acelera la corona solar y el viento solar; determina la estructura y dinámica del plasma y los campos magnéticos en las fuentes del viento solar; y explora los mecanismos que aceleran y transportan partículas energéticas, “según la NASA.

Juntas, las misiones pueden ayudar a desvelar los misterios del sol y proporcionar más datos a los investigadores de los que cualquiera podría lograr por sí solo. Parker puede tomar muestras de las partículas que salen del sol de cerca, mientras que Solar Orbiter volará más atrás para capturar observaciones más amplias y proporcionar un contexto más amplio.