Cientos de veces la energía mecánica equivalente a la explosión nuclear de Hiroshima. Así describió un científico de la NASA la erupción bajo el agua, cerca de las islas de Tonga, del volcán Hunga-Tonga-Hunga-Ha’apai el pasado 15 de enero.
Pero la erupción, no solo envió material volcánico a una altura de hasta 40 kilómetros a la atmósfera, también generó olas de 15 metros de altura que golpearon partes del archipiélago, incluida la isla principal de la nación del Pacífico.
A más de 10 mil kilómetros del fenómeno geológico, en la costa central de Perú, Provincia de Callao, el Buque Tanque Mare Doricum de la petrolera española Repsol, realizaba una descarga de petróleo en el Terminal Multiboyas N° 2 de la Refinería La Pampilla, la que se encuentra activa desde hace más de medio siglo.
El oleaje del agua obstaculizó el desembarque de crudo y ocasionó el vertimiento de 11.900 barriles de este hidrocarburo en el mar y no la fuga de 0.06 barriles que había informado la compañía en un principio.
Esta pasada noche, el satélite Sentinel 2 del @CopernicusEU pudo tomar una imagen óptica de Hunga Tonga-Hunga Ha’pai, en la que se pueden apreciar perfectamente los efectos devastadores de la erupción, habiendo cambiado por completo la morfología de la isla. pic.twitter.com/NgaAwZ0g8x
— Un geólogo en apuros (@geologoenapuros) January 18, 2022
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El petróleo penetró en el agua y pronto, una mancha negra se esparció en el océano. La “marea negra” llegó a las orillas y franjas de 24 playas. También afectó a la fauna del lugar, como aves y lobos marinos manchados con esta sustancia pegajosa que cubre como una segunda piel, los cuerpos, branquias y pulmones de los animales del paisaje costero.
“Es el peor desastre ecológico ocurrido en Lima”, aseguraron desde el Ministerio de Relaciones Exteriores cinco días después.
Dos áreas naturales protegidas a más de 18 mil kilómetros cuadrados como la Reserva Nacional del Sistema de Islas, Islotes y Puntas Guaneras y la Zona Reservada Ancón, también padecieron los impactos del vertimiento. Como consecuencia, según la evaluación de daños y análisis de necesidades de los distritos del litoral peruano perjudicados, resultaron afectados 2.292 pescadores y 2.014 comerciantes, que totalizan 5.006 personas en los distritos de Ancón, Santa Rosa, Ventanilla, Aucallama y Chancay, según informó el Gobierno de dicho país.
A un mes del desastre, el ministro de la cartera de Medio Ambiente (Minam) de Perú, Modesto Montoya, denunció que la multinacional española no había recogido ni el 20% del total de barriles de crudo derramados.
“Se habrán recuperado 2.000 barriles de petróleo y lo que se ha derramado es cerca de 11.000, y por supuesto el resto de petróleo ha ido a otros lugares del mar alejados de la playa que son parte de la contaminación”, dijo la autoridad en conversación con el medio local RPP Noticias.
“Lentamente se están limpiando las playas pero todavía no se cumple de manera entera”, explicó Montoya en esa oportunidad.
El Estado peruano anunció una demanda civil contra Repsol, un hecho inédito, ya que es primera vez que la Procuraduría Pública Especializada en Delitos Ambientales del ministerio puede demandar en el fuero civil a la empresa responsable y solicitar una indemnización por el daño ambiental causado, informa Mongabay Latam.
Además, el Representante Permanente del Perú ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Harold Forsyth, denunció ante el Consejo Permanente a principios de febrero, el impacto ambiental del desastre y lo calificó como “un escenario sin precedentes en su historia”.
Minam.
Por otro lado, la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), una asociación civil que desde 1986 ha trabajado en la promoción de políticas y legislación ambiental en el país, interpuso una denuncia contra la petrolera ante la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre (ATFFS) -ligada al Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR)- una entidad que promueve la gestión sostenible de los recursos naturales del país.
El propósito es sumar argumentos que sustenten la investigación dirigida a sancionar a los responsables por presuntamente abandonar o causar la muerte de especímenes de fauna silvestre.
El Representante Permanente del Perú ante la OEA, Harold Forsyth, denunció ante el Consejo Permanente el impacto ambiental y económico causado por el derrame de petróleo ocasionado por la empresa REPSOL en Ventanilla pic.twitter.com/J0bJAKKd5W
— Perú ante la OEA (@PeruOEA) February 2, 2022
“En este caso no estamos cuestionando el origen, estamos cuestionando la incapacidad de Repsol para haber respondido al derrame de petróleo”, explica a Futuro 360 Isabel Calle, abogada y directora ejecutiva de SPDA.
Minam, 15 de enero 2022.
“Repsol ha señalado que tiene más del 70% de limpieza de las aguas, pero lo cierto es que lo que suele suceder con el petróleo es que se amalgama y se asienta en el fondo submarino. Sobre eso [Repsol] no está señalando nada”, cuenta la abogada.
De acuerdo El País, Repsol reclama una indemnización multimillonaria al armador del buque y su seguro “pues consideran que el accidente fue causado por un brusco desplazamiento del petrolero Mare Doricum”.
El informe de la ONU
La Unidad Conjunta de Emergencias Ambientales, conformada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), elaboraron un informe sobre del derrame de petróleo.
La misión de la ONU llegó el 23 de enero e identificó el tipo de petróleo derramado, “Crudo de Buzios”, una sustancia nueva de la que “no existen ejemplos (…) comparables” de accidentes similares. Cuando los hidrocarburos caen al mar, experimentan diversos cambios físicos que pueden dar lugar a su eliminación o su persistencia, dependiendo de las condiciones climáticas y marinas.
Imagen referencial, ITOPF.
El documento señala que el contenido vertido “es suficiente para permitir la emulsión”. Diversos hidrocarburos absorben agua y forman emulsiones (dispersión de un líquido en pequeñas partículas de agua) en hidrocarburos. Esto puede aumentar el volumen de contaminante hasta cinco veces, según los estándares de International Tanker Owners Pollution Federation Limited (ITOPF).
Los expertos observaron que hubo una afectación a los cormoranes jóvenes (Leucocarbo bougainvillii), un grupo de aves que estaba aprendiendo a nadar y por tanto estaban en estrecho contacto con la superficie del mar. Esta especie se encuentra “casi amenazada”, de acuerdo a la Red List of Threatened Species de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN por sus siglas en inglés).
Cormorán guanay (Leucocarbo bougainvillii), fotografía referencial. Créditos: Fred Leviez.
Por otro lado, la abundancia de plancton en la zona que permite el desarrollo del ecosistema marino, como peces moluscos y crustáceos. Además de que las especies son importantes para la actividad pesquera, que tiene gran importancia de la economía peruana.
Si bien el informe afirma que “la densidad del crudo se mantiene debajo de la densidad de agua marina” -es decir, que tiene menos probabilidades de hundirse- si hay zonas “caracterizadas por una alta concentración de partículas (orgánicas o minerales)” que puede llevar a que se sumerja parte del hidrocarburo.
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Créditos Gestión.pe.
“Nosotros buscamos que se inicie también un procedimiento administrativo sancionador para que se multe Repsol de no haber tenido las medidas necesarias para asegurar que esta fauna no haya sido afectada”, agrega la abogada.
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Repsol creó la página compromisorepsol.pe con el objetivo de monitorear las labores de trabajo. La petrolera aseguró que el cronograma de la operación de las áreas afectadas por el derrame de petróleo de enero ha alcanzado un 94% de avance de saneado. José Reyes, gerente sénior de Seguridad, Calidad y Medio Ambiente de Repsol en Perú, informó a CNN en Español que “la última semana se ha terminado la limpieza de dos nuevas playas, con lo cual suman 18 las que están listas para monitoreo y a la espera de su reapertura para uso público”.
Para Isabel Calle, una pregunta clave es ¿cómo frenar la emergencia para que no siga impactando? y de acuerdo a la abogada “esa medida preventiva se tiene que cumplir y Repsol ya la incumplió”. Ante eso, se establece una multa coercitiva que se prolonga hasta que se cumple la infracción.
“Es un momento complejo en el Perú, hay muchos cambios de autoridades, pero para eso están las organizaciones de la sociedad civil para hacer un seguimiento de los casos y ver que se puede avanzar de ellos”, cuenta.
La indemnización a la población afectada
El primer ministro peruano, Aníbal Torres y el director ejecutivo de Repsol Perú, Jaime Fernández Cuesta, acordaron que la empresa pagará hasta un máximo de 800 dólares como anticipo de indemnización.
“La indemnización se efectuará de acuerdo con la actividad económica de cada persona afectada y que esté consignada en el Único Padrón consensuado”, dice un comunicado.
PCM, 4 de marzo 2022.
El 10 de marzo, el Gobierno autorizó a Repsol el reinicio de sus operaciones de carga y descarga de hidrocarburo en la Refinería La Pampilla. Según el ministro Montoya, la empresa tuvo que presentar la documentación y pruebas de que está trabajando adecuadamente para evitar el riesgo de un nuevo desastre ecológico. Eso sí, la autoridad reconoció que “no ha hecho una adecuada labor, pues ha priorizado su labor en la playa de Ancón, pero aún hay petróleo en la superficie de varios lugares afectados como en los acantilados de Pasamayo y en torno a las islas guaneras“.
Ancón, Minam. 2 de febrero de 2022.
El 18 de marzo, el Ministerio Público informó que se había logrado extraer el PLEM (Pipeline End Manifold), una infraestructura submarina que se ubica al final de una tubería para conectar el ducto submarino de la refinería con las mangueras del buque. Ariel Tapia, de la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental (FEMA), reportó que manejaba algunas hipótesis respecto al sistema metálico submarino que recibe y distribuye los hidrocarburos.
“Las tres hipótesis apuntan a la rotura o fragmentación del PLEM. Producto de un movimiento del buque, este PLEM se habría desprendido, se habría roto. O, tal vez, podría haber sido por el choque del casco (del buque con el PLEM). Son tres hipótesis que se manejan. Esta pieza (el PLEM) va a ser objeto de estudio de laboratorio”, señaló a La República.
Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería.
Para la directora ejecutiva de SPDA, si se llega a comprobar la falta de mantenimiento del PLEM “podría haber una relación con el accidente”. El dueño del Mare Doricum que descargab el petróleo, rechazó esa tesis.
“La distancia entre el fondo del casco del buque y el lecho marino donde se ubica el PLEM era tal que no es físicamente posible que el buque hiciera contacto con dicha plataforma”, argumentó la compañía italiana en un comunicado.
La Sociedad Peruana presentó una serie de propuestas normativas para enfrentar el derrame de petróleo: Para responder de manera oportuna a emergencias, Para que no haya impunidad, Para fortalecer a la ciudadanía afectada y la prevención de derrames de hidrocarburos.
Como en todo país, como en Perú, Colombia o Chile, se desarrollan los procesos administrativos sancionadores, cuyo proceso se tiende a judicializar y en Perú se demora en un promedio de cinco años.
by Constanza Cabrera on Scribd.
“Esos 5 años, queda una sensación de que no hay justicia o que llega muy tarde, pero además la multa no sirve para reparar los daños. La multa puede terminar en una carretera en una región a 4 mil kilómetros de donde fue el derrame”, señala y agrega que “la reparación del daño sea a cargo del Estado, pero a costa de la empresa. Queremos que el ecosistema se repare ahora“, enfatiza.
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