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(CNN) – Docenas de personas fueron evacuadas de un valle en el norte de Italia por temor a que una sección de hielo del tamaño de un campo de fútbol pudiera colapsar por un glaciar del Mont Blanc. Alrededor de 75 personas, incluidos 60 turistas, abandonaron el Ferret Valley en la región alpina del Valle de Aosta.
Stefano Miserocchi, el alcalde de Courmayeur, también cerró una carretera principal en el valle la noche del jueves, según los sitios web de las aldeas afectadas. En una conferencia de prensa el viernes, Valerio Segor, director de gestión de riesgos naturales de la región, señaló que la evacuación no podía demorarse.
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“La medida no pudo posponerse luego de un estudio del glaciar de Planpincieux que muestra una sección de 500.000 metros cuadrados de hielo que podría desprenderse rápidamente de la roca“, sostuvo Segor.
Ubicado en el macizo del Mont Blanc, el glaciar ha estado bajo vigilancia desde 2012 debido a los efectos del cambio climático, según Fabrizio Troilo, de la Fundación Montagna Sicura (Montaña Segura), que se encarga de monitorear el glaciar. El glaciar se clasifica como “templado” en lugar de “frío” porque tiene agua entre la masa de hielo y la montaña.
Evolución rápida
“La fractura del glaciar es muy profunda y el cuerpo de 500,000 metros cuadrados está totalmente separado de la roca subyacente“, indicó Troilo. “La velocidad de movimiento es mucho más alta. Podemos ver esto desde el monitoreo fotográfico, moviéndose más de un metro por día”.
Las altas temperaturas a fines de julio y principios de agosto, seguidas de una breve ola de frío que causó nieve en las elevaciones más altas esta semana, han exacerbado el problema, causando una fractura entre la roca y la masa de hielo.
Troilo dijo que el potencial de colapso comenzó nuevamente en abril, pero ha aumentado en las últimas semanas, con la sección de hielo pasando por una “evolución muy rápida” en los últimos 15 días.
El verano pasado, los esfuerzos de vigilancia se intensificaron con la adición de sondas y otras herramientas técnicas para monitorear mejor el glaciar.
Miserocchi aseguró que el pueblo de Courmayeur y el resto del Mont Blanc permanecen “perfectamente seguros”, y agregó que los turistas aún pueden disfrutar de sus vacaciones alpinas.
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