El proyecto OCO-2 de la NASA entrega las estimaciones de las emisiones y remociones de dióxido de carbono en naciones individuales mediante la utilización de mediciones satélites que ha realizado la misión Orbiting Carbon Observatory-2 ( OCO-2 ).
Este estudio internacional cuenta con ayuda de 60 investigadores, quienes analizaron los datos tomados por OCO-2 e instrumentos en la superficie para cuantificar los aumentos y disminuciones en las concentraciones de dióxido de carbono atmosférico de 2015 a 2020.
Los hallazgos incluyen datos de más de 50 países que no han informado emisiones durante al menos los últimos 10 años.
“Estas estimaciones se basan en resultados NCE (flujos de ecosistemas fósiles más terrestres) “de arriba hacia abajo” del proyecto de intercomparación de modelos (MIP) del Observatorio de Carbono en Órbita v10 (OCO-2), en el que un conjunto de grupos de modelado inverso realizó experimentos estandarizados asimilando el aire seco promediado en columnas OCO-2 fracción molar () recuperaciones (ACOS v10), mediciones de CO₂ in situ o combinaciones de estos datos”, explican.
En específico, el estudio entrega una nueva perspectiva al rastrear las emisiones de combustibles fósiles como los cambios totales en las reservas de carbono en los ecosistemas: se incluye árboles, arbustos y los suelos.
En relación con las naciones que más emiten CO₂, los gráficos son claros: China y Estados Unidos son los principales responsables de emitir considerablemente más dióxido de carbono a la atmosfera. Seguido por la India, Rusia y Brasil.
“Las emisiones de la deforestación por sí solas constituyen una cantidad desproporcionada de la producción total de carbono en el Sur Global, que abarca regiones de América Latina, Asia, África y Oceanía”, detallan los autores.
En cuanto a la reducción de las concentraciones de carbono atmosférico, el equipo detalla que esto ocurre debido a una mejora en la administración de la tierra de la reforestación.
Chile en los gráficos
Entre los gráficos publicados en el estudio y los videos compartidos por la NASA se puede observar e inferir que en lo que se refiere a las emisiones de dióxido de carbono, desde 2015 hasta 2020, nuestro país se encuentra en un nivel medio.
Pasando a la categoría de los cambios en la cantidad de carbono almacenado en la materia orgánica en la tierra, entre 2015 y 2020, nuestro país ha presentado una buena actividad en la mejora de la administración de la tierra y la deforestación.
Si bien los datos son prepandémicos, no olvidemos que en Congreso Futuro, el Premio Nobel de la Paz 2007 y recocido científico del suelo Rattan Lal dijo que Chile “tiene problemas serios con la sanidad del suelo”, lo que afecta a 76 millones de hectáreas, y una baja eficacia en el uso de nitrógeno, lo que aumenta la descarga de nitrógeno en el medio ambiente.
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