(CNN) – La temperatura de la Tierra se disparó el mes pasado cuando una ola de calor extremo quemó el sur de los EE. UU. y México y el calor del océano se disparó a niveles alarmantes, según muestra un nuevo informe.
El análisis del Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea encontró que el mes pasado fue el junio más caluroso del planeta por un “margen sustancial” por encima del récord anterior, que se estableció en 2019.
Los nueve junios más calurosos han ocurrido en los últimos nueve años, según la agencia, evidencia de que la crisis climática causada por el hombre está llevando las temperaturas a niveles sin precedentes.
Copernicus también encontró que las temperaturas de la superficie del océano fueron las más altas registradas en junio, impulsadas principalmente por un calor excepcional en el Atlántico Norte y un fortalecimiento de El Niño en el Pacífico.
El incendio de San Antonio se extiende cuesta arriba al oeste de Petaluma, California, el viernes. California experimentó una ola de calor durante el largo fin de semana del 4 de julio. Crédito: Kent Porter/The Press Democrat/AP
El análisis se produjo cuando los datos de las agencias climáticas globales sugirieron que el planeta experimentó su día más caluroso registrado a principios de esta semana, primero el lunes y luego nuevamente el martes.
“Esto es alarmante”, dijo a CNN Jennifer Marlon, científica climática de la Escuela de Medio Ambiente de Yale que no participó en el análisis. “Es difícil imaginar cómo serán los veranos para nuestros hijos y nietos en los próximos 20 años. Así es exactamente como se ve el calentamiento global”.
Los científicos han advertido que estas temperaturas récord llevan las huellas dactilares de la crisis climática. Y para empeorar las cosas, las estrellas se están alineando este año para que se rompan muchos más récords a medida que El Niño, que también tiene un impacto en el calentamiento, empuja las temperaturas a niveles sin precedentes.
El noroeste de Europa experimentó temperaturas récord en último lugar, incluido el Reino Unido, que registró el mes de junio más caluroso registrado, según la Oficina Meteorológica del Reino Unido. Las temperaturas en partes de Canadá, Estados Unidos, México, Asia y el este de Australia fueron “significativamente” más cálidas de lo normal en junio, según el informe.
En los EE. UU., Texas y partes del sur experimentaron una ola de calor brutal a fines de junio, con temperaturas de tres dígitos Fahrenheit y humedad extrema. El calor, que se extendió hacia el sur hasta Centroamérica, mató al menos a 112 personas en México desde marzo.
Los días extremadamente calurosos, lo que podría considerarse los días más calurosos del verano, son más frecuentes ahora que en 1970 en 195 lugares de los EE. UU., según el grupo de investigación Climate Central. De esos sitios, aproximadamente el 71% ahora enfrenta al menos siete días adicionales de calor extremo cada año.
Los océanos continuaron con una notable tendencia de calentamiento desde principios de 2023, según el informe del jueves.
El Atlántico Norte registró temperaturas oceánicas excepcionalmente cálidas en junio, con una ola de calor marina de categoría 4, definida como “extrema”, observada alrededor de Irlanda, el Reino Unido y el Mar Báltico.
Las temperaturas en Texas aumentaron a los tres dígitos en junio. Crédito: Kaylee Greenlee Beal/Reuters.
Si bien el aumento de la contaminación que calienta el planeta es uno de los principales impulsores de ese calor extremo, los científicos dicen que se espera que El Niño aumente aún más las temperaturas de los océanos este año.
“El calentamiento de los océanos es aún más preocupante porque a medida que los océanos se calientan, se expanden, lo que significa niveles del mar más altos, marejadas ciclónicas más grandes y más inundaciones en las comunidades costeras”, dijo Marlon.
El mes pasado también fue más húmedo que el promedio en la mayor parte del sur de Europa y partes de Islandia y Rusia, con fuertes lluvias que causaron inundaciones en Turquía, Kosovo y Rumania. Mientras tanto, varias partes del mundo, desde Europa del Este y Escandinavia hasta gran parte de América del Norte, experimentaron condiciones más secas que el promedio en junio, con incendios forestales en el Cuerno de África, Canadá y partes de América del Sur y Australia.
El hielo marino antártico también alcanzó su nivel más bajo durante el mes de junio, un 17% por debajo del promedio, desde que comenzaron las observaciones satelitales, rompiendo el récord anterior de junio establecido el año pasado.
Según Copernicus, la extensión diaria del hielo marino alrededor de la Antártida se mantuvo en niveles “bajos sin precedentes” para esta época del año.
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