La organización ambiental Greenpeace ha lanzado una campaña urgente para detener la expansión de la mina Los Bronces, ubicada en la cordillera de los Andes y operada por Anglo American. Esta acción responde al riesgo que representa la ampliación de la mina para el futuro de las reservas de agua en la Región Metropolitana de Santiago.
En una demostración sin precedentes, activistas de Greenpeace se colgaron sobre el puente Nueva Tobalaba y desplegaron un cartel de 25 metros sobre el río Mapocho con el mensaje: “Más minería en glaciares, menos agua para Santiago”. Esta iniciativa busca alertar a la población sobre los peligros que enfrentan los glaciares de los Andes Centrales debido a la actividad minera y cómo esto podría afectar la disponibilidad hídrica en la capital chilena.
“Buscamos movilizar a todos los santiaguinos para que rechacemos en conjunto el proyecto de ampliación, Los Bronces Integrado. Las consecuencias que podría tener sobre nuestras reservas de agua son gravísimas, y su efecto sobre la contaminación del aire y en nuestra biodiversidad, no han sido informados ni dimensionados por los habitantes de la capital”, afirmó Carmen Barahona, una de los voluntarias que participó en la protesta.
Los Bronces Integrado es un proyecto de Anglo American que pretende extender la operación de la mina Los Bronces hasta el año 2036. Sin embargo, su aprobación ha generado preocupación debido a los impactos ambientales que podría tener, especialmente en los glaciares de la región. Desde Greenpeace se argumenta que los intereses políticos y económicos han primado sobre los aspectos técnicos y ambientales en la aprobación de este proyecto.
Silvana Espinosa, vocera de Greenpeace, destaca que el proyecto fue inicialmente rechazado por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) en 2022 debido a la falta de información concluyente proporcionada por la empresa. Sin embargo, esta decisión fue revocada por el Comité de Ministros, lo que generó un fuerte rechazo por parte de organizaciones ambientales y comunidades locales.
Además del impacto en la calidad del aire y la biodiversidad, Greenpeace advierte sobre el impacto directo en los glaciares debido a la emisión de polvo y carbono negro, lo que acelera su deshielo y pone en riesgo el suministro de agua para la población.
En respuesta a esta amenaza, diversas organizaciones y movimientos sociales han presentado recursos judiciales y administrativos para revertir el permiso de operación otorgado a la mina. Greenpeace también ha habilitado un sitio web donde los ciudadanos pueden mostrar su rechazo al proyecto.
El informe “Glaciares de la Cordillera de Los Andes, Impactos de la industria minera“, elaborado por Greenpeace, detalla los riesgos asociados a la actividad minera en la región y está disponible en su página web para su consulta.
Deja tu comentario