(CNN) – La crisis climática está afectando enormemente a Europa, que fue devastada por el calor extremo, la sequía, los incendios forestales y el derretimiento de los glaciares el año pasado, concluyó un nuevo análisis.
Un informe conjunto de la Organización Meteorológica Mundial y el Servicio de Cambio Climático Copérnico de la Unión Europea encontró que el verano pasado fue el más caluroso registrado en Europa y causó más de 16.000 muertes en exceso, según el informe.
“Desafortunadamente, esto no puede considerarse un hecho único o una rareza del clima”, dijo Carlo Buontempo, director del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, en un comunicado. Agregó que la comprensión actual del sistema climático “nos informa que este tipo de eventos son parte de un patrón que hará que los extremos de estrés por calor sean más frecuentes e intensos en toda la región”.
Varios países, incluidos el Reino Unido, España, Suiza e Italia, vieron sus años más calurosos registrados en 2022.
Europa es el continente que se calienta más rápido en el mundo, según el informe, y se ha estado calentando dos veces más rápido que el promedio mundial durante las últimas cuatro décadas.
El continente no solo era cálido, sino también extremadamente seco, con grandes implicaciones para la agricultura y el suministro de agua. Muchas partes del continente experimentaron niveles muy bajos de precipitación el año pasado, y Francia experimentó su período más seco de enero a septiembre registrado. En España, las reservas de agua se desplomaron a poco más del 40% de su capacidad, según el informe.
El suelo agrietado del embalse de La Viñuela durante una sequía severa en La Viñuela, cerca de Málaga, sur de España, el 8 de agosto de 2022. Crédito: Jon Nazca/Reuters
La sequía persistente y las altas temperaturas provocaron intensos incendios forestales. Europa experimentó la segunda área quemada más grande registrada en 2022, según el informe, con Europa Central y el Mediterráneo, en particular, viendo grandes áreas quemadas por el fuego.
Los glaciares de los Alpes europeos tuvieron un mal año, experimentando una pérdida récord de masa de hielo debido a las bajas nevadas, las temperaturas cálidas y el polvo del Sahara, lo que hace que los glaciares sean más oscuros, lo que significa que absorben más calor y se derriten más rápido.
Y los océanos eran inusualmente cálidos, con temperaturas promedio de la superficie del mar en el Atlántico Norte, las más altas registradas. Las tasas de calentamiento en partes del mar Mediterráneo, los mares Báltico y Negro y el sur del Ártico fueron más de tres veces el promedio mundial, según el informe.
Con la llegada de El Niño, un fenómeno climático natural con un efecto de calentamiento global, a muchos científicos les preocupa que el 2023 pueda ver extremos climáticos aún más marcados.
Pero también hay señales esperanzadoras. El informe encontró que la energía renovable generó más electricidad que el gas fósil por primera vez el año pasado, con la energía eólica y solar representando el 22,3% de la electricidad de la UE, mientras que el gas fósil representó el 20% y la energía del carbón el 16%.
“El aumento del uso de fuentes de energía renovables y bajas en carbono es crucial para reducir la dependencia de los combustibles fósiles”, dijo el secretario general de la OMM, Petteri Taalas, en un comunicado.
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