2034. Ese sería el año en que se cumpliría la totalidad de las metas planeada por la Ley REP, respecto al reciclaje de envases y embalajes en Chile.
De manera unánime y luego de casi un año, desde la publicación del decreto que establece metas de reciclaje, el Consejo de Consejo de Ministros para la Sustentabilidad, aprobó la propuesta entregada por el Ministerio de Medio Ambiente. Este mantendrá las metas respecto al porcentaje al cual se quiere llegar con cada material, pero se aumentará el plazo estimado.
En resumen, al cuarto año de la implementación de la ley se busca llegar a un 15% de reciclaje del cartón para líquidos y metal, un 18% para papel y cartón, 11% para plástico y 22% para vidrio.
En tanto, para el séptimo año, el plástico debería llegar al 20%, el metal al 25%, cartón para líquidos un 27%, papel y cartón un 34% y vidrio a un 37%. Situación que en un inicio, se esperaba ocurriera al tercer año.
En consecuencia, lo que antes se esperaba concretar en un plazo de 9 años, ahora será en 12. Esto será un 45% de plástico, 55% de metal, 60% cartón para líquidos, 65% para vidrio y 70% para papel y cartón.
“Vamos a avanzar de forma más paulatina durante los primeros años, pero sin renunciar al objetivo medio ambiental que es la meta final. Llegar a ese momento tres años después, nos pareció prudente para asegurar el éxito en la implementación de esta ley”, detalló al medio País Circular, el jefe de la Oficina de Economía Circular del Ministerio del Medio Ambiente, Guillermo González.
Otra modificación es desde cuando comenzará a regir este decreto. Esta se dará 30 meses después de la publicación del documento en el Diario Oficial, por ende, su vigencia podría empezar en 2023. Esto se produciría por temas de procedimientos y gestión.
“La ambición se mantiene totalmente aunque nos demoremos un poco más”, afirma González a País Circular. “Es importante dar una señal de largo plazo. Estas cosas toman tiempo, es una transformación logística, pero por sobre todo, es una transformación cultural”, detalla.
El avance de los recicladores de base
Esta versión final del decreto incorporará un “Plan de formalización de los Recicladores de Base”. Una que busca asegurar que al menos un 50% de las instalaciones de recepción y almacenamiento de residuos reciclables incorporen a esto trabajadores. Además, se deberá crear un programa de capacitación exclusivo para ellos.
Otra modificación, será que podrán contratar a los recicladores de base y pagarles el precio de mercado por el trabajo de recolección. No solo por la venta del producto que recuperen.
Respecto a esto, y en conversación con Futuro 360, la presidenta de los recicladores de base, Soledad Mella, afirmó que “Es una tremenda noticia. Para nosotros es un gran logro”. Pero agregó que ellos esperaban que el pago proviniera directamente del Estado. “Nosotros estábamos pidiendo que el Estado se hiciera cargo, porque creemos que hay una deuda histórica tremendamente grande con nuestro rubro”, señala.
“Ganamos una batalla que estábamos dando hace mucho y finalmente se reconoce nuestra labor como cualquier otra tarea. Importante también es que se pague como cualquier otro trabajo que hace cualquier otra persona. Por ese lado, es súper bueno”, concluye.
Respecto al aumento de plazos para cumplir las metas, señala que consideran que son los tiempos son extensos, pero son comprensibles a la realidad nacional. “Hubiésemos querido que fuera mucho más corto, pero comprendemos el contexto chileno”, afirma. A eso agregó que como Asociación Nacional de Recicladores Informales, podrán prepararse de mejor manera y estar presente en todos los procesos.
Aumento de viviendas y comunas
Otra de las modificaciones es respecto a la cantidad de viviendas en las que se recolectará este material. En los 12 años, se busca llegar a un 80% de viviendas, que corresponde a un total de 5.200.000 hogares.
Con eso también se aumentó la cantidad de comunas que estarán obligadas a instalar infraestructura para reciclaje.
Durante el primer año, deberán instalar y operar todas las comunas que tengan una población de 250 mil habitantes. Al segundo, deberán hacerlos aquellas con más de 100 mil. Al tercero las de 30 mil y finalmente, al cuarto año, las con más de 15 mil habitantes. De esta manera, se logrará tener 350 puntos limpios en cuatro años.
En esta nueva modificación también se podrá compensar las meta entre materiales. Los sistemas de gestión domiciliaria podrán compensar hasta el 50% de la meta de una categoría de residuo específica, con cualquier otra categoría de material. Esta compensación podrá ser de hasta un 100% de la meta para los residuos industriales. Esta situación, sólo será posible durante los primeros cuatro años de implementación.
Con todos estos cambios se espera evitar 7,7 millones de toneladas de residuos. Se estima que el costo de implementación será de US$ 2.346 millones y los beneficios de US$ 2.788 millones. Lo que significa un beneficio neto de US$ 442 millones, siendo más del doble que lo calculado con el anteproyecto que ahora fue modificado.
Deja tu comentario