Los cambios bruscos de temperatura, la sequía y los distintos eventos climáticos que azotan a diario distintos puntos del planeta nos confirman que la tierra sufre la peor crisis ambiental de la que se tenga memoria. Estamos en un punto de no retorno y si no comenzamos a cambiar nuestros hábitos de vida y consumo, nuestros hijos jamás disfrutarán de la naturaleza como nosotros lo hicimos.
Conscientes de ello, cada vez son más las empresas nacionales y extranjeras que asumen la responsabilidad que les corresponde en la tarea de salvar el planeta de esta debacle, e impulsan iniciativas de ahorro energético, reciclaje y cuidado medioambiental.
Lee también: Paso a paso: ¿Cómo me convierto en líder de Desafío Plástico?
Una de ellas es Hunter Douglas, empresa colombiana de cortinajes de lujo que este año cumple un siglo de existencia. Consultado respecto a ello, Francisco Urrutia, gerente división WCP (Windows Covering Products) de Hunter Douglas Chile, destacó el fuerte compromiso de la empresa con la gestión integral en el ámbito del cuidado ambiental y al mismo tiempo, el bajo perfil que siempre les ha gustado mantener como organización.
“No nos gusta la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) desde el punto de vista del marketing. A nosotros nos interesa ser cuidadosos del medio ambiente como un compromiso personal y profesional que tenemos, pero no para hacer publicidad, sino para cumplir con ciertos estándares globales e individuales”, dijo Urrutia.
Lee también: Todavía estamos a tiempo de salvar la Tierra: Súmate a Desafío Plástico
“Por eso nuestras duchas en la fábrica son acondicionadas con intercambiadores de temperatura, la energía es ciento por ciento renovable y desarrollamos muchos productos cuyo propósito es el ahorro energético de los edificios, de las casas, entre otros. Esto es parte de lo que ofrecemos como empresa, el crear soluciones sustentables para toda la comunidad”, aseguró.
Explicó también que otra de las grandes contribuciones ambientales de la empresa está vinculada a la descontaminación del fondo marino y consiste en una cortina roller confeccionada con una tela a la que llamaron Sea Tex, la cual está compuesta en un 50 % por plástico extraído del océano.
Además, informó que la idea de crear esta tela nació en Colombia y consideró multitudinarias jornadas de recolección de plástico en playas de ciudades costeras del país. En cada ocasión, los voluntarios recolectaron cerca de 700 kilos de plástico. Todos estos desechos fueron enviados primero a la empresa Bionic -propiedad del cantante Pharrell Williams- para su procesamiento, y luego a una empresa filial de Hunter Douglas, para la finalización del ciclo de fabricación de la tela.
Tanto en Colombia, como en el resto del mundo la acogida a Sea tex ha sido masiva, sorprendiendo a los propios empresarios textiles, quienes han subrayado que la razón de esta respuesta ciudadana ha sido la mayor conciencia ambiental y de sostenibilidad que existe hoy en el mundo. “Esta respuesta nos confirma que estamos haciendo bien las cosas y estaríamos felices si pudiésemos unirnos con otras instituciones públicas y privadas para impulsar nuevas iniciativas de reciclaje o resguardo medioambiental” aseguró Urrutia.
En Chile, anualmente la organización sin fines de lucro Prohumana creada en 1997, confecciona un ranking que considera a las empresas cuya Responsabilidad Social Empresarial es mayor que sus competidoras pues promueven mayores iniciativas de cuidado ambiental dentro de sus instalaciones y en sus procesos de producción.
Las empresas distinguidas son evaluadas en 7 dimensiones: Gestión integral, Gobernanza, Público Interno, Proveedores, Clientes, y/o Consumidores y Medioambiente. Las tres empresas elegidas y premiadas por Prohumana en 2018 fueron: L’Oréal Chile en el área de la cosmética, París representando al retail y Transelec SA en el rubro de la electricidad.
Deja tu comentario