Ya sabemos que los microplásticos se encuentra presentes en todas partes: desde el té que tomamos hasta nuestras vías sanguíneas. Ahora, sabemos que a la semana estamos inhalando la cantidad de microplástico necesaria para producir una tarjeta de crédito.
Investigadores han detallado que hasta la fecha, en la literatura aún falta una compresión precisa sobre el transporte de microplásticos por las vías respiratorias, es por ello que se han dedicado a indagar sobre esto en su nuevo estudio, el que contó con la participación de académicos de todo el mundo.
Utilizando un modelo de dinámica de fluidos computacionales, los investigadores exploraron de una forma segura cómo los microplásticos se mueven por nuestras vías respiratorias superiores en diferentes condiciones de respiración.
Los resultados son increíbles, ya que por primera vez se han encontrado microplásticos en las profundidades de las vías respiratorias humanas. Esto ha planteado una preocupación sobre los graves peligros para la salud que esto representa.
El artículo también indica que los microplásticos más grandes probados -de 5,56 micrones- son los que se suelen atascar en nuestras vías respiratorias superiores, como la cavidad nasal o la parte posterior de la garganta.
Estaríamos inhalando cerca de 16,2 bits de plástico cada hora, lo que equivale a una tarjeta de crédito a la semana.
“La forma anatómica complicada y altamente asimétrica de las vías respiratorias y el complejo comportamiento del flujo en la cavidad nasal y la orofaringe hacen que los microplásticos se desvíen de la línea de flujo y se depositen en esas áreas“, detallan los autores.
Al comparar varias regiones de nuestras vías respiratorias, encontraron que la cavidad nasal es la que posee una alta tasa de deposición de microplásticos.
En un segundo estudio, el equipo se centrará en el efecto que provoca las diferentes formas de microplásticos en las vías respiratorias de los humanos, en condiciones de personas sanas y enfermas.
El aumento de microplástico se debe a que la sociedad se encuentra fabricando cada día más cosas con plástico. También la ropa tiene un rol clave en su aumento, puesto que se están creando piezas de baja calidad como una forma de afrontar el alto consumo.
El estudio fue publicado en la revista Physics of Fluids.
Deja tu comentario