Para los habitantes de Cuya, Caleta Camarones y el pueblo de Camarones, en la Región de Arica, la disponibilidad hídrica se reduce a la repartición en camiones aljibes de hasta 2 mil litros cúbicos de agua por persona a la semana.
Por ello, buscando una alternativa sustentable para captar agua en zonas rurales con escasez hídrica, es que se desarrolló el proyecto Transferencia Tecnológica Social Basada en la Captación de Agua de Niebla para Zonas Rezagadas: Un Pilotaje de Atrapanieblas, iniciativa FIC-R 2022 que propone obtener agua de la niebla de las costas de Arica y Parinacota, conocida como camanchaca.
El proyecto es dirigido por el arqueólogo del Instituto de Alta Investigación de la Universidad de Tarapacá, Dr. Calogero Santoro, junto a un equipo de investigadores, quienes trabajaron en una tecnología piloto de atrapanieblas que pueda capturar el agua de la Quebrada de Camarones.
El agua de neblina como complemento
¿En qué consiste? Se trata de una transferencia tecnológica a las comunidades que podrán utilizar el sistema al capacitarse acerca de la instalación, manejo y autogestión de la tecnología.
El proyecto contará con atrapanieblas instalados en el Cerro Sur de la Caleta y en el pueblo de Camarones. Según el Dr. Santoro el trabajo “derivó de una investigación de cómo ha venido evolucionando este desierto hasta el presente” y para revertir esta transformación del desierto buscaron alternativas que “permitan un mejor manejo de sus recursos como es el uso del agua de la camanchaca, que significa salirse de la tradición de bombear desde las napas subterráneas”.
“Esta iniciativa presenta una innovación en la que se puedan generar nuevas fuentes de captación de agua, para nosotros es importante que eso suceda y que la ciencia esté a disposición de las necesidades de las comunidades rurales (…)”, comentó el gobernador regional, Jorge Díaz.
Por su parte, el alcalde de la comuna de Camarones, Cristian Zavala, contó que “accedimos inmediatamente y nos pusimos a disposición. Por lo que tenemos que agradecer primero que vuelvan los FIC a la región y que tengan esa connotación que le han dado el gobernador regional y los consejeros y consejeras regionales, quienes han sido bastante visionarios en que estos FIC puedan solucionar problemas ancestrales que tienen las comunidades rurales”.
Además de las localidades de la Quebrada de Camarones, el proyecto también contempla el aplicar la tecnología y las investigaciones en los valles de Azapa y Lluta.
Origen histórico de este invento
El físico de la Universidad de Chile, Carlos Espinosa, junto a Elsa Terraza y otros colegas de la Universidad del Norte, crearon lo que es reconocido como el primer modelo de “atrapanieblas”.
El profesor Espinosa murió a los 98 años, en Santiago, en compañía de sus familiares. Según señala El Mercurio de Antofagasta, el invento demandó años de trabajo y la creación vio la luz en 1956 cuando Espinosa tenía 32 años.
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