Las consecuencias que dejó la tormenta de arena que azotó las regiones de Arica, Tarapacá, Antofagasta y Atacama se tradujeron en vientos de más de 100 kilómetros por hora, visibilidad reducida, vuelos cancelados y caminos cortados.
Se trata de un fenómeno que ocurre cuando una corriente de viento de alta velocidad baja a sectores con suelo que contiene polvo y tierra. Particularmente, en el norte del país, se ocasionó por la bajada de una “corriente de chorro”, un flujo de aire intenso que normalmente se encuentra en la atmósfera.
Más información a continuación.
Deja tu comentario