El agujero en la capa de ozono es un problema que, por mucho tiempo, dejó de preocupar a los científicos por una disminución sostenida en su tamaño.
Sin embargo, una nueva investigación realizada por el Servicio de Monitoreo Atmosférico Copernicus (CAMS) descubrió que este fenómeno ubicado sobre el continente Antártico creció, alcanzando uno de sus peaks históricos abarcando un área tres veces más grande que Brasil.
Según explican los expertos de CAMS, el fenómeno se habría producido producto de la enorme erupción del volcán Hunga Tonga, la cual disparó una enorme cantidad de agua a la atmósfera terrestre en 2022.
Un preocupante crecimiento
Los datos que corroboran el crecimiento del hoyo en la capa de ozono fueron recolectados con el satélite Copernicus Sentinel-5P, e indican que este año esta zona alcanzó un porte de 26 millones de kilómetros cuadrados.
Antje Innes, ciéntfico del CAMS, aseguró que “nuestros servicios de monitoreo y predicción de ozono mostraron que el hoyo comenzó a crecer a comienzos de 2023, y su ritmo de apertura aumentó desde mediados de agosto“.
Según reportó IFLScience, el agujero de ozono suene fluctuar en tamaño, creciendo y achicándose dependiendo de las estaciones del año. Usualmente, su periodo de apertura más grande suele ocurrir entre agosto y octubre, cuando el Hemisferio Sur entra a la primavera.
Aun así, y a pesar de que este año haya crecido más de lo esperado, el agujero se estaría encogiendo y según proyecciones de expertos en meteorología, en unas cuantas décadas se recuperará por completo.
Deja tu comentario