Hasta ahora, los científicos consideraban un misterio el cómo la bacteria C. auris apareció en más de 30 países alrededor del mundo una década luego de que fuera descubierta por primera vez en 2009.
Emergió simultáneamente en 3 países -India, Venezuela y Sudáfrica- entre 2012 y 2015, donde cada sepa era genéticamente distintiva.
Un estudio, publicado en la revista mBio y realizado por la Escuela de Salud Pública John Hopkins Bloomberg, afirma que este seria amenaza a la salud pública podría ser el primer ejemplo de una enfermedad por hongos que surge a causa de la crisis climática.
“El argumento que estamos haciendo, en base a la comparación con otro hongo similar, es que mientras el clima se ha hecho más cálido, algunos de estos organismos -incluyendo a Candida auris-, se han adaptado a temperaturas más altas”, afirmó el coautor del estudio Arturo Casadevall, director del departamento de microbiología e inmunología de la Escuela de Salud Pública John Hopkins Bloomberg para CNN.
“Y, mientras se adaptan, rompen la barrera natural de la temperatura humana. El calentamiento global podría conducir a nuevas enfermedades provocadas por hongos, de las que actualmente no sabemos nada“, agregó Casadevall.
Los expertos han advertido que la crisis climática podría “detener y revertir” el progreso del desarrollo humano en el ámbito de la salud.
Para éste estudio, los investigadores observaron la susceptibilidad de la C. auris y descubrieron que era capaz de adaptarse y crecer a temperaturas más altas a las que muchos de sus familiares podrían resistir.
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Este estudio teoriza que la C. auris era un hongo ambiental, encontrado inicialmente en humedales. Este pudo haber tenido un huésped intermediario, como un pájaro marino por ejemplo, que lo haya transmitido a los seres humanos.
Las infecciones por hongos son relativamente raras en el cuerpo de los humanos, ya que estos no pueden crecer en el rango de temperatura interna de las personas, y se les hace aún más difícil desarrollarse mientras son constantemente atacados por las defensas naturales de nuestro sistema.
Estudios anteriores han demostrado que de las millones de especies de hongos, sólo unas cientas pueden provocar enfermedades humanas.
De acuerdo al US Centers for Disease Control and Prevention, en algunos casos severos dónde esta súperbacteria ataca se puede producir una infección sanguínea, por lo que los expertos afirman que la C. auris es una “seria amenaza para la salud global”.
El hongo se adhiere al equipamiento médico, a los hospitales y luego se contagia de una persona a otra, según demuestran estudios anteriores.
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Como pueden haber otros factores para la aparición de esta súperbacteria, los autores sugieren que se deben realizar más estudios.
Un estudio publicado a comienzos de 2019 afirma que un cambio en las condiciones climáticas podría alterar la propagación ambiental de hongos e influenciar su habilidad de infectar a otros.
Sin embargo, “debido a la falta de conocimiento acerca de su hábitat natural, es imposible determinar a estas alturas si los cambios climáticos jugaban un rol la aparición reciente de hongos que actúan como patógeno humano”.
Otros estudios han culpado a la propagación a medicamentos antihongos, pero el último estudio discute que dicha teoría no explica fácilmente por qué se volvieron un patógeno humano en tres continentes diferentes de la noche a la mañana.
Pero a pesar de todo, los autores del estudio afirman que se necesitan mejores sistemas de vigilancia para estudiar a las infecciones por hongos como el C. auris. A menos que las enfermedades sean reportadas en la literatura médica, los científicos no sabrán cómo este hongo se está propagando.
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