Los expertos concluyen que el aumento del nivel del mar podría registrarse más rápido de lo presupuestado, y esta alza, se podría traducir en un incremento de hasta un metro, hacia finales de siglo. Todo eso, a menos que se reduzcan las contaminantes emisiones globales.
Basados en el conocimiento sobre la sensibilidad climática y el derretimiento de los polos, los investigadores aseguran que las ciudades costeras, deberían prepararse para un impacto que golpeará más pronto de lo ha proyectado la ONU. Incluso, los océanos podrían subir hasta cinco metros para el año 2300.
“Un aumento global de los niveles del mar en varios metros podría ser perjudicial para muchas ciudades costeras del mundo (…) Algunas deberán ser abandonadas por completo ya que no podrán ser recuperadas”, aseguró el coautor del estudio Stefan Rahmstorf, investigador del Instituto Postdam para el Impacto Climático en Alemania.
En el peor de los escenarios, se estima que la superficie de los océanos del mundo subirán de entre 0,6 a 1,3 metros en comparación a los niveles actuales, lo que podría consumir áreas donde residen millones de personas. Todo esto podría ser una preocupante realidad, en el año 2100, refiere el mismo estudio científico.
“Las actividades humanas, el ritmo de vida acelerado y la quema de combustibles fósiles han liberado a la atmósfera enormes cantidades de gases que atrapan el calor, aumentando la temperatura del planeta. Esta emergencia climática, lamentablemente, también repercute en el océano”, aseguró Camila Ahrendt, bióloga marina y directora científica de Plastic Oceans Latinoamérica para Futuro 360.
“El planeta se está calentando y está existiendo un desorden en las estaciones del año, provocando la ausencia de lluvias y de nieve. A ello, un aumento constante en la temperatura. Esto provoca un deshielo dramático en las montañas, glaciares y casquetes polares (Groenlandia y la Antártica) y por tanto, un aumento de la escorrentía, desembocando en el océano, y aumentando su nivel”, nos explica la especialista.
Según la bióloga, el aumento del nivel del mar ya es un hecho a nivel mundial y sus consecuencias pueden ser devastadoras en los hábitats costeros. Extensas costas, humedales y manglares, que son cada uno, un núcleo clave para la biodiversidad, podrían verse afectadas por la inundación.
“Entre un 50 y 60% de toda la población mundial vive en las zonas costeras. Y estimaciones recientes, indican que aproximadamente 600 millones de personas viven en zonas bajas”, apuntó.
Finalmente, Ahrendt advirtió que las islas de baja altura, también son un factor de riesgo ante la subida del nivel del mar. “Por lo tanto, la población que se encuentra en éstas zonas mencionadas, serán cada vez más vulnerables al riesgo de inundaciones. La subida del nivel del mar obligaría a abandonar hogares y a mudarse a otra zona”, concluye la profesional.
Deja tu comentario