Investigadores afirman que no sólo las estrellas jóvenes escupen superllamaradas de alta energía. Las estrellas viejas, como el sol, también pueden generar olas de energía que podrían ser lo suficientemente fuertes para arrancar las atmósferas de aquellos planetas que orbiten cerca.
Dichas superllamaradas pueden ser vistas a cientos de años de luz de distancia. Los astrofísicos habían asumido que sólo las estrellas jóvenes creaban este tipo de explosiones. Sin embargo un equipo de investigadores ha documentado superllamaradas erupcionando desde estrellas de mediana edad, las cuales tienen una temperatura y radio similar a nuestro sol.
Estas llamaradas masivas pueden ser por lo bajo de cien a mil veces más poderosas que las ondas solares que la Tierra normalmente experiencia.
Lee también: ¡Felicitaciones! Acabas de sobrevivir los 5 años más calientes de la historia
Sin embargo, las llamaradas de estrellas viejas son difíciles de encontrar. “Hemos descubierto superllamaradas erupcionando una vez cada 2 mil a 3 mil años en estrellas parecidas al sol”, afirma Yuta Notsu de la Universidad de Colorado Boulder, coautor del estudio para Science News. En contraste, este fenómeno se presente de forma mucho más frecuente en estrellas jóvenes; una vez cada ciertos días.
Usando datos del telescopio espacial Kepler, el equipo de Notsu observo alrededor de 90 mil estrellas y descubrió 300 que juntas produjeron más de mil superllamaradas en menos de 500 días de observación.
Esto junto con información del telescopio espacial Gaia, el equipo redujo el grupo a 113 estrellas parecidas al Sol en tamaño y temperatura.
Lee también: Descubren desde el desierto de Atacama al único sistema solar con planetas gigantes
Con un análisis más profundo, los investigadores redujeron su campo para incluir sólo a estrellas de rotación lenta, lo cual es señal de una avanzada edad. Comparando las frecuencias de las superllamaradas con la edad de las estrellas, los científicos predijeron que nuestro sol, de 4.6 mil millones de años de antigüedad, podría experimenta un fenómeno de este tipo en los próximos mil años.
Esta relativamente pequeña llamarada podría ser extremadamente peligrosa para la sociedad en el planeta Tierra. Destruyendo fuentes de energía, comunicaciones satelitáles y otros sistemas electrónicos.
Lo más cerca que ha estado la tierra de una superllamarada en el pasado reciente fue en 1859, suceso conocido como el Evento de Carrington, que hizo flaquear a estaciones de telégrafo en todo el mundo. Información histórica proveniente de anillos de árboles y núcleos de hielo sugiere que la Tierra pudo haber sido afectada por dos superllamaradas en 774 y 993 d.C.
Deja tu comentario