Si eres un fan de la ciencia ficción, probablemente hayas visto unas cuantas franquicias que muestran un futuro en donde la humanidad conquistó el Universo. Y generalmente la nave que les permitió hacerlo es capaz de “doblar el espacio” o viajar más rápido que la velocidad de la luz.
“Si lográramos construir una nave que viaje al 90% de la velocidad de la luz, alcanzaríamos Marte en, aproximadamente, 12 minutos para el reloj de los que está contando desde la Tierra, pero en unos 6 minutos, la mitad del tiempo, para el astronauta que va arriba de la nave”, explica Rodrigo Herrera, astrónomo de UDEC-CATA.
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Una idea bastante genial. Sin embargo -y desafortunadamente- las inmutables leyes de la física nos aseguran que esto es imposible.
Aún así, la física que gobierna nuestro Universo nos permite viajar a una velocidad cercana a la de la luz, a pesar de que alcanzar dicho impulso tomaría una cantidad tremenda de energía.
En el viaje veríamos todo diferente. “Uno tiene el frente mucho más brillante que lo que tiene a su espalda y eso se debe a que estamos recibiendo constantemente mayor cantidad de luz en un sentido que en el otro. Eso genera un efecto de túnel“, comenta Sergio Vásquez, astrónomo del MIM.
Las mismas leyes físicas también aseguran que llegar a esas velocidades tiene amplias consecuencias y desafíos. Afortunadamente, la NASA se refiere a estos problemas y cálculos en un video animado que cubre todo lo básico de los viajes interestelares.
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En resumen, de acuerdo a leyes de la física (específicamente a la de la Relatividad Especial de Einstein), es imposible viajar más rápido que la luz.
Esto significa que si intentas saltar al espacio, tu mejor opción es apostar a un trayecto largo o encontrar medios de propulsión que puedan permitir una aceleración constante hasta que puedas conseguir una fracción relativa de la velocidad de la luz.
“Lo que pasaría sería que, quienes viajen a la velocidad de la luz, si bien para ellos el tiempo va a ocurrir de manera normal, al compararlo con la Tierra, habrá pasado muchísimo más tiempo sobre la Tierra”, señala Teresa Paneque, astrónoma FCFM U. de Chile.
La realidad nos dice que los aparatos espaciales más rápidos son las sondas Voyager y Parker, las que alcanzan a desplazarse entre unos 15 a 20 kilómetros, por segundo. Pero, hay esperanza, porque la innovación tecnológica, siempre nos puede sorprender.
“Nuestra meta es que, en los próximos 20 años, podamos construir naves de este estilo, que al ser impulsadas por el sol y por láseres, alcancen el 20% de la velocidad de la luz”, señala el astrónomo de UDEC-CATA
El video, titulado “La guía de la NASA para viajar a una velocidad cercana a la luz”, podemos ver a un simpático alienígena que construyó una nave capaz de surcar el espacio a un 90% de la velocidad de la luz.
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Además el registro se refiere a las diferentes complejidades que acarrearía alcanzar un impulso tan grande, como la dilatación del tiempo, la necesidad de fabricar un escudo interestelar lo suficientemente poderoso y manejar los diferentes tiempos de viaje.
Y, si bien, aún no podemos siquiera imaginar fabricar viajes de este tipo, siempre es divertido tener una didáctica guía que explique la ciencia detrás de nuestros programas, películas y libros de ciencia ficción favoritos.
Martes / 22:30 / CNN Chile
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