Naves robóticas de “carga inalámbrica” en la superficie de Venus, micro sondas inspiradas en arañas, trajes espaciales que se recuperan solos y minería en los polos lunares son proyectos que la NASA aprobó para un mayor desarrollo.
Aunque muchos proyectos seleccionados por el programa de Innovación de Conceptos Avanzados de la agencia espacial (NIAC) parecen estar sacados de las páginas de las páginas de las mejores novelas de ciencia ficción, hay una posibilidad de que se vuelvan reales durante la siguiente década.
La NIAC provee fondos de hasta 500 mil dólares para desarrollar tecnologías revolucionarias que beneficiarán los vuelos espaciales humanos y las misiones de exploración cósmica.
El 2019, el programa seleccionó 12 proyectos para los fondos de la fase 1, los que están evaluados en alrededor de 125 mil dólares, y 6 para la fase 2, los cuales reciben el dinero total del programa.
Lee también: El hombre que regresó más joven: La NASA descubre que estar en el espacio causa cambios físicos
Los estudios de la fase 1 duran 9 meses y permiten a los investigadores a desarrollar aún más sus ideas, mientras que los de la segunda etapa dura dos años, y están enfocada en construir las ideas de los científicos.
Los ganadores
El concepto “Venus Lander” consiste en un vehículo de “arquitectura dual”: una flota y recolecta energía de la atmósfera de Venus para transmitirla a una nave estable que se quedará en la superficie del planeta.
La idea extenderá las misiones a la superficie de Venus, entregando una fuente constante de energía en un ambiente que es particularmente desagradable para los visitantes terrestres.
Otro proyecto se tratará del diseño de unos ingenieros de Texas A&M llamado SmartSuit. Estaría planeado para ampliar la movilidad y agilidad pero también incluiría tecnologías robóticas suaves, sensores y una piel que se recupera a si misma que actúa como capa protectora.
Lee también: Primera imagen de un agujero negro: Observatorio ALMA explica la importancia de este descubrimiento
Uno de los conceptos más interesantes se inspira en el vuelo arácnido, acción donde las arañas disparan seda al aire para atrapar una corriente de viento.
Proponen que las pequeñas sondas trabajen juntas, pesen menos de 50 miligramos y floten atados a una cuerda de 200 metros. Soltar las “sondas araña” en la atmósfera durante futuras misiones planetarias permitirá a los investigadores obtener una mejor imagen del interior del planeta.
Además de los ya mencionados, hay otros 15 proyectos compitiendo para pasar de los planos a la realidad, incluyendo minería lunar, detectores de neutrinos, y sondas que viajen a la velocidad de la luz para la exploración del espacio profundo.
Es un buffet de conceptos sacados de la ciencia ficción, de los cuales Cnet asegura, se puede sacar mucho potencial.
Deja tu comentario