Restos óseos prehispánicos fueron encontrados en Ñuble - (02:17)
Por decenas de miles de años, la muela de un Neandertal quedó atrapada en una tumba poco profunda al interior de la Cueva Stajnia, en lo que ahora es Polonia. Y por todo ese tiempo, ADN mitocondrial viable se mantuvo en su interior – y ahora, finalmente, los científicos lograron revelar los secretos que guardaba.
Nombrado Stajnia S5.000, el diente perteneció a un Neandertal que vivió hace 80.000 años, de acuerdo al nuevo análisis. Lo que significa que el individuo estuvo vivo durante un tiempo esencial de la agitación ambiental por la que pasó la especie.
El paisaje de la Europa del centro-este pasó por una transformación bastante dramática hace unos 100.000 años, al interior del Paleolítico Mediano.
El mundo se encontraba al borde de una era de hielo conocida como el Último Periodo Glacial, y los neandertales habitaban el noroeste y Europa central cambió de ricos bosques a taigas y estepas frígidas.
Dicho clima cayó como anillo al dedo a los mamuts y rinocerontes lanudos, además de los venados que se adaptaron rápidamente a las gélidas condiciones, sin embargo, los cambios mostraron ser mucho más desafiantes para los Neandertales.
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Mientras la región comenzó a congelarse, la población de esta especie adyacente a la humana comenzó a decrecer, solo volviendo una vez que las temperaturas volvieron a subir como parte de una reducción temporal de la glaciación, caracterizada por cambios extremos en las temporadas y bajas cantidades de biomasa, en resumen; llegaron tiempos difíciles y la comida comenzó a escasear.
Fue durante uno de estos periodos – conocido como Isótopo Marino de Etapa 5a (MIS 5a por sus siglas en inglés) que ocurrió hace unos 82.000 años atrás – que los Neandertales Altai de Asia Central fueron reemplazados por poblaciones de Neandertales de Europa Occidental.
Pero, incluso con muchos de los Neandertales huyendo a ambientes más templados, un tipo específico de herramientas llamadas micoquienses, usadas en las gélidas zonas que ahora componen Francia, Polonia y Cáucaso – sugieren que algunos Neandertales fueron capaces de adaptarse al cambiante mundo.
“Polonia, localizado entre las Planicies Europeas Occidentales y los Urales, es una región clave para entender estas migraciones y para resolver algunas de las preguntas sobre la adaptabilidad y biología de los Neandertales en el hábitat periglaciar” aseguró Andrea Picin, arqueólogo del Instituto Evolutivo Max Planck en Alemania a ScienceAlert.
Las herramientas micoquienses comenzaron a aparecer por primera vez en Europa del Este hace unos 130.000 años – un poco después de que los Neandertales Europeos comenzaron a reemplazar a las poblaciones de Asia Central.
Existen otras pistas que sugieren cambios en las estrategias de supervivencia. La cueva en sí misma, los investigadores creen, es demasiado estrecha como para funcionar como un establecimiento permanente. Sin embargo, diferentes grupos de Neandertales podrían haberlo usado como un campamento temporal.
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El diente descubierto por los expertos permitió trazar al espécimen a los tiempos en que todos estos cambios ocurrieron.
“Estuvimos sorprendidos de que el análisis genético revelara que el diente tiene al menos 80.000 años atrás. Los Fósiles así de viejos son bastante difíciles de encontrar, y no están tan bien preservados”, aseguraron los arqueólogos Wioletta Nowaczewska y Adam Nadachowski de la Universidad de Wroclaw y la Academia Polaca de Ciencias.
“Descubrimos que el genoma mitocondrial de Stajnia S5000 fue más cercano a los Neandertales de Cáucasos”, agregó Mateja Hajdinjak del Instituto Max Planck. Y el ADN estuvo más separado del ADN de los especímenes cercanos al hallazgo.
Esta distancia podría explicar por qué los artefactos micoquienses se pueden encontrar en tantas partes diferentes.
La investigación fue publicada en Scientific Reports.
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