El SARS-CoV2 tiene una proteína que le permite, gracias a la ayuda de un receptor, unirse a la célula e infectarla. Así propagarse por todo el cuerpo. Su nombre es Spike (espiga en español) y se le podría catalogar como la llave que tiene el virus para entrar a las células y, en consecuencia, esparcirse por el cuerpo.
Si bien Spike es la llave de entrada, el cuerpo tiene una proteína que actúa como receptor y este es el ACE2, presente en varios tejidos, como alvéolos, mucosa intestinal, riñones, vasos sanguíneos, sistema nervioso, entre otros. De ahí los diversos daños que este virus genera en una persona. Este receptor, entonces, cumpliría la función de cerradura.
El virólogo de la Fundación Ciencia y Vida, Nicolás Muena, explica a Futuro 360 que la proteína Spike cumple dos funciones claves, por una parte permite que el virus se una a las células, pero también cumple la función de fusión de la membrana de virus que se fusiona con la capa que recubre la célula. “Entonces esta proteína además de unirse y permitir la unión a la superficie de las células, después permite que se produzca esta función de membrana y al fusionarse las membranas, tanto del virus como de la célula, se libera el material genético del virus y este puede salir“, detalla Muena.
Inhibir al virus
El virólogo comenta que hay una región particular de la proteína Spike, llamada RBD (Receptor Binding Domain), que es la unión o dominio de unión al receptor y que será el más importante o más relevante a la hora de relacionarse con el ACE2. “Entonces si tú diriges, por ejemplo, anticuerpos o péptidos proteínas solubres que bloqueen en esta región, la llave no puede ingresar a la cerradura. Esa región en particular de Spike, parece ser una de las más relevante al momento de diseñar o producir anticuerpos dirigidos contra esa zona. Si los diriges, la proteína no puede interactuar con su cerradura ACE2 y el virus no puede entrar”, explica el especialista.
En un artículo publicado en Zientzia Kaiera y que fue traducido por BBC Mundo, las profesoras del Departamento de Fisiología en la Universidad del País Vasco, Begoña Sanz y Gorka Larrinaga plantean que si se engaña al virus, el ACE2 podría ser la llave para la cura.
Para explicar esto, las especialistas también agregan otro eslabón. Se trata del Sistema Renina Angiotensina (RAS), que es un sistema hormonal que regula principalmente la tensión arterial. La ACE2 es una de su enzima clave. “El virus está usando esta ACE2 y se produce una vasodilatación. Entonces en vez de estar usando las superficies de las células, se internaliza junto con el virus, lo cual significa que el sistema tiene menos ACE2 para regular la tensión arterial. Eso desregula el sistema”, explica Nicolás Muena.
De esta manera, Begoña Sanz y Gorka Larringa sugieren que el desequilibrio del RAS provocaría la inflamación grave y la cicatrización descontrolada posterior del pulmón dañado (fibrosis pulmonar), además de los procesos trombóticos.
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“Cuando la ACE2 está siendo usada por el virus, deja momentáneamente de ejercer su acción normal, deja de hacer su pega normal, porque está secuestrado por el virus. Entonces ahí el virus podría precisamente descontrolar el RAS y producir estos efectos”, agrega Nicolás Muena.
Según comentan las académicas, los especialistas han propuesto engañar al virus. ¿Cómo? Inyectar moléculas ACE2 libres en la sangre para que el virus se quede unido a ellas y no en los receptores celulares del cuerpo. De esa manera, se neutralizaría la infección y se evitaría el desquilibrio en el RAS.
Acción que ya ha mostrado resultados positivos en procesos in vitro y se realiza ahora un ensayo clínico para pacientes con COVID-19.
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Respecto a esto, el virólogo de la Fundación Ciencia y Vida señala que es súper importante que estos resultados positivos sean evaluados en ensayos clínicos y conocer si es seguro mostrando afinidad con la proteína Spike e inhibiendo la infección del virus. Pero también insiste en que es necesario demostrar que no produce problemas de hipertensión o hipotensión al usarlo en pacientes sanos. Eso considerando la función que cumple el RAS. “Podría ser bastante prometedor si es que tiene una muy buena afinidad por la Spike”, finaliza Muena.
La técnica de neutralizar los virus
Inhibir los virus es una técnica que se utiliza recurrentemente. “En virología siempre estamos buscando moléculas inhibidoras o anticuerpos neutralizantes dirigidos contras estas moléculas de superficie de los virus, porque son muy relevantes en la entrada a las células”, explica Nicolás Muena.
En el caso de este experto, lo ha trabajado particularmente en el virus hanta, en donde se ha enfocado en buscar los anticuerpos que impidan la entrada a la célula.
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