VIDEO RELACIONADO – Los hongos que podrían asegurar alimentos en el futuro (02:40)
Las experiencias psicodélicas pueden, algunas veces, ser duras para el ego de una persona. Aquellos que experimentan con el uso de “hongos mágicos” y LSD aseguran sentir una disolución del ser, muchas veces conocido como “muerte, pérdida o desintegración del ego”.
“Esta -destrucción del ego- a través de psicoactivos, es altamente experimental y más que una ‘anulación’, se trataría de una integración del ego a las otras áreas de la personalidad; algo así como destruir a Dios”, explica a Futuro 360 Juan Ariel Zúñiga, jefe de Salud Mental en Vidaintegra.
Lee también: Científicos sueñan reemplazar energía eléctrica por plantas que brillan
Para algunos la experiencia puede ser un momento decisivo en la vida, mientras que para otros, puede ser aterrador. Aún así, e incluso a través de diferentes anécdotas de buenos o malos viajes, nadie sabe con exactitud qué hacen estas drogas en la percepción.
Se piensa que esta sensación del ser se encuentra en la corteza cerebral, y cada vez se suma mayor evidencia, que un neurotransmisor llamado glutamato se eleva en esta región, cuando alguien está alucinando.
“El glutamato se encuentra en el cerebro, y es un mediador que se relaciona con las condiciones de ansiedad. Dentro de los neurotransmisores es uno de los menos conocidos y todavía se indaga en qué situaciones está presente en el cerebro”, apunta al respecto Zúñiga.
Sin embargo, hasta ahora, sólo contábamos con evidencia observacional al respecto. Por primera vez, un grupo de investigadores observó directamente cómo el consumo de psilocibina, activa la actividad de glutamato en el cerebro; lo que sugiere que este tendría una participación fundamental al momento de definir “el viaje”.
En un experimento doblemente ciego y controlado a través de placebos, neurocientíficos analizaron cuidadosamente lo que le ocurre a los niveles de glutamato y cómo esto afecta al ego de una persona cuando consume psilocibina, el ingrediente activo de los “hongos mágicos”.
Usando escáneres de resonancia magnética para monitorear el cerebro de 60 voluntarios saludables, el equipo realizó cambios significativos en la actividad tanto de la corteza como del hipocampo cerebral, a través de dichos procesos alucinógenos. El glutamato es el neurotransmisor más común en el cerebro, y se sabe que es esencial para la señalización rápida de información, especialmente en las áreas del cerebro estudiadas, los cuales se cree, juegan un rol fundamental en la construcción del autoestima.
Una investigación psicodélica
Al parecer los científicos lograron identificar cómo los psicodélicos alcanzan este sistema. Curiosamente, estas dos regiones del cerebro, presentaron respuestas de glutamato totalmente diferentes.
Por un lado, encontraron elevadas cantidades del neurotransmisor en la corteza prefrontal durante un “viaje”, viendo que los niveles de glutamato bajaban en el hipocampo. Este cambio de los parámetros, podría definir si una persona tiene una buena o mala experiencia con su ego al consumir psicoactivos.
“Análisis indicaron que las alteraciones de las regiones dependientes de glutamato, también estaban correlacionadas con las diferentes dimensiones de la disolución del ego”, escribieron los autores.
Lee también: Científicos encuentran partículas celulares de hongos flotando en la atmósfera
A pesar de esto, todavía no tenemos un conocimiento total de cómo esta actividad cerebral está enlazada con el ego, o inclusive, si se relaciona de cualquier forma. Aún así, estudios sugieren que estas áreas del cerebro se desacoplan a través de psicodélicos, haciendo que la información autobiográfica se separe de la sensación de identidad personal.
“Nuestra información apoya dicha hipótesis, sugiriendo que las modulaciones del glutamato del hipocampo en particular podrían jugar un rol fundamental de mediador en el desacople de los sentimientos profundos tanto negativos como positivos al momento de la disolución del ego”, destaca el estudio.
Luego de décadas de investigaciones limitadas, las drogas como la psilocibina, LSD y DMT están siendo consideradas por sus beneficios terapéuticos.
“Este avance es importante ya que permite a los especialistas indagar en los psicoactivos para ocuparlos como una medicina contra padecimientos psicológicos”, apunta Evelyn Benavides, Neuróloga de la Clínica Vespucio.
“No hay que olvidar que los estímulos psicodélicos pueden causar problemas en dosis muy altas. Con la sobreestimulación que provoca en las neuronas en partes no específicas, puede dañar zonas del cerebro que regulan las funciones vitales, como la respiración. Muchas de las muertes por sobredosis ocurren por esto mismo”, agregó Benavides.
Lee también: Investigadores aseguran que una dosis de “hongos mágicos” reduce la depresión en pacientes con cáncer
Entender cómo estas drogas funcionan neuroquímicamente podría permitir a los científicos desarrollar mejores tratamientos para aquellas personas con problemas en su salud mental, tales como la depresión y la ansiedad.
Entender cómo estas drogas funcionan neuroquímicamente podría permitir a los científicos desarrollar mejores tratamientos para aquellas personas con problemas en su salud mental, tales como la depresión y la ansiedad.
Deja tu comentario