VIDEO RELACIONADO – Pingüinos gigantes habitaron América del Norte y Japón – (00:58)
Es una criatura que parece ser una mezcla entre una serpiente y un gusano. Han existido por miles de años, pero los científicos acaban de realizar un fascinante hallazgo sobre estos curiosos animales.
Aunque los caecilians no tengan casi nada en común con las serpientes (siendo algo así como un primo lejano), una nueva investigación demostró que al parecer cuentan con un mecanismo similar a las glándulas venenosas. Esta es la primera vez que éstos tejidos son encontrados en un anfibio, y al parecer, el veneno de su mordida sería es bastante peligroso.
Si se confirma que estas glándulas contienen veneno, los caecilian podrían transformarse en el animal vertebrado terrestre más antiguo en desarrollar una mordida venenosa, y así revelar uno de los secretos que la naturaleza ha guardado por milenios.
“Estos animales producen dos tipos de secreciones – una es está en su cola y es venenosa, mientras su cabeza produce un moco que lo ayuda a deslizarse por la tierra”, asegura el biólogo Carlos Jared, del Instituto Butantan en Brasil a ScienceAlert.
Lee también: ¿Cuántos años tiene tu mascota? Estudio revela sorprendente dato sobre la edad de los perros
“Debido a que son unos de los vertebrados menos estudiados, su biología es una caja negra llena de sorpresas”, agrega Jared.
El biólogo Pedro Luiz Mailho, del mismo instituto, y principal autor del texto revela que las glándulas del pequeño animal, estudió en profundidad a la especie conocida Siphonops Annulatus. Un análisis microscópico, mostró que el tejido tóxico no se originaba en la epidermis, como ocurre en la mayoría de los anfibios venenosos, si no que en su cavidad bucal.
Esto se equipara a cómo las glándulas venenosas de las serpientes están conectadas, lo que no suele ocurrir en anfibios; transformando al caecilian en algo así como una “celebridad biológica”.
Aunque las proteínas de los fluidos de la glándula coincidieron con lo que esperarías encontrar en el veneno, el mundo científico sigue esperando las respuestas de qué contiene dicha sustancia, y cómo las otras especies de caecilian (alrededor de 200) comparten dichas características.
Sin embargo, ya se barajan unas cuantas teorías sobre cómo estos animales utilizarían esta mordida venenosa.
“Ya que los caecilians no tienen brazos ni piernas, su boca es la única herramienta con la que cuentan para cazar”, asegura la bióloga experta en evolución Marta María Antoniazzi, del Instituto de Butantan.
Lee también: Reportan misteriosas muertes masivas de más de 350 elefantes en África
“Creemos que activaron sus glándulas orales cuando muerden algo, y que biomoléculas especializadas son incorporadas en sus secreciones”, agregó Antoniazzi.
Los hallazgos no son sólo importantes para la especie, sino que también aportan a completar el mapa evolucionario de este tipo de animales. Estos anfibios subterráneos existen desde hace mucho más tiempos que las serpientes, lo que podría significar que fueron los primeros en desarrollar este tipo de mordida.
Ni los reptiles ni las serpientes tienen alguna forma de armadura, ni pies o brazos para defenderse, por lo que es posible que una la mordida venenosa naciera para ayudar a reptiles y anfibios sin la necesidad de extremidades.
Deja tu comentario