Descubren océano subterráneo oculto en luna de Júpiter - (3:03)
Ganímedes, la luna de Júpiter, es un trozo de roca espacial bastante especial.
Es la luna más grande y masiva del Sistema Solar. Además, es la única luna del Sistema Solar que genera su propio campo magnético.
Tiene más agua líquida que cualquier otro cuerpo en el Sistema Solar y, además, ahora un grupo de científicos descubrió que el satélite cuenta con la estructura de impacto más grande de la que se tenga registro.
Los científicos descubrieron que los canales tectónicos conocidos como “surcos”, los cuales se creía que eran las estructuras geológicas más antiguas de Ganímedes, forman una serie de anillos concéntricos de hasta 7.800 kilómetros de largo, como si algo hubiese impactado la Luna.
Lee también: Satélite Juno descubre lluvia de plasma en el polo norte de Ganimedes
Aunque esta teoría debe ser confirmada con más observaciones, los anillos habrían sido formados por un impacto mayor a todos los otros cráteres del Sistema Solar.
Se cree que los surcos de Ganímedes son canales con elevadas y filosas esquinas, y por mucho tiempo se ha considerado que son el resultado de grandes impactos en la historia temprana del satélite, cuando su litósfera se encontraba aún relativamente débil y delgada.
Sin embargo, un análisis de la luna conducido por el planetólogo Naoyuki Hirata del Universidad de Kobe cuenta otra historia.
Para tener un mejor entendimiento de la historia de Ganímedes, Hirata y sus colegas observaron detalladamente a las imágenes obtenidas por dos satélites investigadores lanzados entre 1979 y 2003.
Lee también: Astrónomos aseguran que en Júpiter existen granizos gigantes de amoniaco
Estas fotografías revelaron que la luna tiene una compleja historia geológica. El satélite está dividido en dos tipos de terrenos; el Oscuro y el Claro. El segundo es mucho más claro y relativamente libre de cráteres, sugiriendo que es un territorio mucho más joven que el dañado lado Oscuro.
A través de la clasificación de los sectores, los científicos llegaron a la conclusión de que las estructuras que dividían los dos tipos de terrenos estaban ordenadas como si estuvieran concentradas alrededor de un sólo punto concéntrico, lo que indica que no se habrían producido por múltiples impactos.
Esto se habría desencadenado por un impacto masivo que, según las simulaciones del equipo de astrónomos, habría sido causado por un asteroide de 150 kilómetros de diámetro que viajaba a 20 kilómetros por segundo.
Deja tu comentario