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El asteroide Ryugu es ligero y esponjoso, según sugieren las imágenes capturadas por la nave japonesa Hayabusa-2.
“Es altamente poroso, similar a una piedra pómez”, agregan los científicos a cargo del proyecto en Nature. “Es algo como el café liofilizado”, asegura el experto en planetas de la Agencia de Exploración Aeroespacial Japonesa (JAXA) Tatsuaki Okada.
Ryugu es un antiguo asteroide rico en carbón. Se cree que esta roca espacial es una cápsula del tiempo del sistema solar, y para poder desentrañar sus misterios, el Hayabusa-2 la exploró desde junio de 2018 a noviembre de 2019, trayendo de vuelta a la tierra dos muestras.
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La nave espacial observó cómo la superficie del asteroide retuvo y liberó calor, lo cual es una pista sobre su composición y estructura. Las rocas densas absorben el calor lentamente y lo mantienen por una mayor cantidad de tiempo, mientras que los objetos más porosos cambian de temperatura rápidamente, como la arena en las playas.
El mapa de calor del Ryugu muestra que cerca del 50% del cuerpo es poroso, lo que significa que su mitad está llena de hoyos, según Okada y sus compañeros. Incluso, los numerosos desniveles que tiene el asteroide son rocosos.
Esta composición calza con la idea de que Ryugu es una suma de escombros, que se formó tras la fragmentación de un cuerpo más grande hace 700 millones de años atrás. Las nuevas observaciones sugieren que ese cuerpo de origen también era poroso.
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“Esto podría ser común en asteroides, e incluso para los protoplanetas que se formaron al inicio de nuestro sistema solar”, asegura Okaya para Science News.
Si esto fuese cierto, podría tener grandes implicancias sobre qué tan rápido se forman los planetas. Los astrónomos creen que, en sus inicios, el sistema solar era un lugar violento en el cual los protoplanetas chocaban, rompiéndose y reformándose a través del tiempo.
Los planetas porosos hubieran sido capaces de desarmarse y reensamblarse más fácilmente que los densos. Esto significa que “la escala de tiempo de la formación de planetas podría cambiar drásticamente”, concluye Okada.
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