China está cambiando el paradigma arquitectónico en relación a la construcción de edificaciones más sustentables, con una mirada a la mitigación de sus contaminantes y para ofrecer una experiencia más cercana a la naturaleza a sus visitantes.
En un nuevo proyecto inmobiliario, la empresa Büro Ole Scheeren apunta a la titánica construcción de un hotel en la ciudad costera de Sanya, China, una famosa por sus lujosos centros turísticos y arrecifes de coral.
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El hotel se llamará Sanya Horizons y tendrá una altura de 160 metros. Lo más interesante es que poseerá una fachada enrejada llena de vegetación. Entregando sombra en su interior.
büro ole scheeren designs tropical resort on sanya's stunning coastline https://t.co/2K6o59Do9a pic.twitter.com/RadNqIG7L0
— Desk Achitecture (@desk_design) March 11, 2022
“Los volúmenes horizontales apilados de Sanya Horizons están curvados planimétricamente para abrazar el océano y mejorar aún más las abundantes vistas, con cada habitación de hotel con su propia terraza privada y vistas al mar 100% sin obstrucciones”, detalló la inmobiliaria.
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Denominada “jungla vertical”, sus varias especies de vegetación también minimizará las cargas de viento estructurales.
“La fachada consiste en una rejilla hexagonal profunda de balcones y pasillos que brinda una protección completa contra el sol y, por lo tanto, reduce drásticamente aún más la huella energética del edificio”, agregan.
Se espera que su construcción comience en 2022 y esté terminada en 2026.
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