Un grupo de investigadores logró por primera vez lo imposible: desviar un rayo. La impresionante hazaña fue realizada gracia al disparo de un poderoso rayo láser apuntado al cielo.
El disparo de luz concentrada logró “doblar” la trayectoria de la descarga eléctrica antes de que lograra alcanzar un pararrayos, alargando la vida útil del aparato.
La investigación que detalla la hazaña fue publicada en Nature, y demuestra que los láseres ahora también podrían ser utilizados como un nuevo método de protección en contra de las tormentas eléctricas, fenómenos meteorológicos que pueden causar muertes y daños estructurales bastante elevados.
Láseres: ¿Los nuevos pararrayos?
Según reportó ScienceAlert, la idea usar láseres como pararrayos proviene de los años ’70. El principio es simple, si un láser es lo suficientemente poderoso, puede calentar el aire tan rápidamente que gatilla a las moléculas a desprenderse de sus electrones.
Esto crea un canal de electrones cargados junto a lo largo del rayo láser, los que son capaces de atraer rayos, ya que estas descargas suelen seguir el paso de menor resistencia hasta alcanzar el suelo.
Para asegurarse de que este canal se mantuviera abierto por el tiempo suficiente como para que el láser pudiera desviar un rayo, los científicos a cargo del experimento dispararon un láser que contaba con 1.000 pulsaciones por segundo.
Un nuevo e impresionante método para detener a las peligrosas descargas que, según reporta National Geographic, pueden llegar a causar cerca de 24.000 muertes al año alrededor de todo el mundo.
Martes / 22:30 / CNN Chile
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