(CNN) – Las personas que usaban cigarrillos electrónicos para dejar de fumar los encontraron menos útiles que las ayudas para dejar de fumar más tradicionales, según un nuevo estudio.
El estudio, publicado el lunes en la revista BMJ, analizó los últimos datos de 2017 a 2019 del Population Assessment of Tobacco and Health Study, que sigue el consumo de tabaco entre los estadounidenses a lo largo del tiempo.
“Esta es la primera vez que encontramos que los cigarrillos electrónicos son menos populares que las ayudas farmacéuticas aprobadas por la FDA, como medicamentos o el uso de parches, gomas de mascar o pastillas”, dijo John P. Pierce, director de ciencias de la población del Moores Cancer Center de la Universidad de California, San Diego.
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“Los cigarrillos electrónicos también se asociaron con una salida menos exitosa durante ese período de tiempo“, dijo Pierce, profesor emérito de medicina familiar y salud pública. De hecho, casi el 60% de los ex fumadores recientes que eran consumidores diarios de cigarrillos electrónicos habían reanudado fumar en 2019, según el nuevo estudio.
“No hay evidencia de que el uso de cigarrillos electrónicos sea una ayuda efectiva para dejar de fumar”, dijo Pierce.
Un ensayo aleatorizado de tres meses en el Reino Unido, publicado en 2019, encontró que los cigarrillos electrónicos, junto con las intervenciones conductuales, ayudaron a los fumadores a dejar de fumar cigarrillos de tabaco. En una guía publicada a finales de 2021, el Instituto Nacional de Excelencia en Salud y Cuidado del Reino Unido decidió recomendar que los fumadores usaran cigarrillos electrónicos para ayudarlos a dejar de fumar.
Sin embargo, los estudios observacionales en los Estados Unidos que estudian fumar en entornos del mundo real no han encontrado que eso sea cierto, dijo Pierce. Un estudio de 2021 realizado por su equipo encontró que las personas que dejaron de fumar cigarrillos de tabaco entre 2013 y 2016 cambiando a cigarrillos electrónicos u otros productos de tabaco tenían un 8,5% más de probabilidades de reanudar fumar en comparación con las personas que dejaron todos los productos de tabaco.
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Repunte en el uso por parte de los adolescentes
Los defensores de los cigarrillos electrónicos como herramienta para dejar de fumar dicen que las versiones con mayor nicotina deberían ayudar a los fumadores de cigarrillos de tabaco a dejar los cigarrillos de tabaco porque podrían quitar menos bocanadas de un vaporizador que fumar todo el cigarrillo, dijo Pierce.
“En 2017, las ventas de cigarrillos aumentaron un 40%”, y la mayoría de la cuota de mercado estaba en manos de nuevas marcas de cigarrillos electrónicos con niveles muy altos de nicotina, dijo.
“Queríamos mirar estas nuevas versiones con alto contenido de nicotina y ver si hay alguna evidencia de que ayudaran a la gente a dejar de fumar porque las anteriores no lo hicieron”.
En lugar de un repunte en el uso por parte de los fumadores, el estudio encontró que el uso de cigarrillos electrónicos como ayuda para dejar de fumar disminuyó un 25% durante el período de dos años, dijo Pierce.
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¿Los cigarrillos electrónicos de mayor octanaje ayudaron a aquellos que los usaron a dejar de fumar?
“No podemos estudiar la efectividad de estos cigarrillos electrónicos altos en nicotina porque ningún fumador los estaba usando durante la mayor parte del período de dos años”, dijo Pierce. Hubo un pequeño repunte en 2019, agregó, que tendrá que ser analizado cuando se publiquen los próximos datos de PATH.
Si los fumadores no estaban impulsando el repunte en las ventas durante 2017 a 2019, ¿quién fue?
Más adolescentes estaban usando vaporizadores durante ese período, según datos recopilados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos. En septiembre de 2018, el entonces comisionado de la FDA, el Dr. Scott Gottlieb estaba llamando al uso adolescente de cigarrillos electrónicos “una epidemia”.
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El trabajo previo de Pierce y su equipo ha descubierto que los cigarrillos electrónicos pueden funcionar como una droga de entrada para muchos adolescentes. Un estudio de 2021 encontró que los jóvenes de 12 a 24 años que usaban cigarrillos electrónicos tenían tres veces más probabilidades de convertirse en fumadores diarios de cigarrillos en el futuro.
Además de una conexión con el tabaquismo posterior, el vapeo por parte de los adolescentes también se ha relacionado con problemas psicológicos, dolores de cabeza, dolores de estómago y adicciones significativas a la nicotina. En 2019, los adolescentes comenzaron a morir por daño pulmonar que más tarde se conectó a productos químicos en líquidos de vaporizador, incluido el acetato de vitamina E, según la Asociación Americana del Pulmón.
La FDA le dijo a CNN que la agencia no comenta estudios específicos, sino que “los evalúa como parte del cuerpo de evidencia para mejorar nuestra comprensión sobre un tema en particular y ayudar en nuestra misión de proteger la salud pública”.
“La FDA está revisando los hallazgos del documento”, dijo la oficial de prensa de la FDA Alison Hunt por correo electrónico.
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