(CNN) – A medida que aumentan los nuevos casos de coronavirus en Estados Unidos, los funcionarios de salud están recurriendo a los teléfonos celulares para ayudar a frenar la propagación de la infección.
Gracias a la tecnología disponible en los teléfonos de Apple y Google, ahora las personas pueden recibir notificaciones en algunos estados si es que estuvieron cerca de alguien que luego dio positivo por COVID-19. Las alertas llegan a través de aplicaciones del departamento de salud estatal que usan tecnología Bluetooth para detectar cuándo alguien (o más precisamente, su teléfono) ha estado en contacto cercano con el teléfono de una persona infectada.
Si bien estas aplicaciones no pueden mantener a las personas a salvo -sólo les avisan después de haber estado expuestas-, podrían evitar que otros se infecten si esos individuos toman precauciones, como ponerse en cuarentena después de recibir una alerta.
Millones de personas se están registrando, aunque estas aplicaciones aún no están disponibles en muchos estados. Los funcionarios de salud creen que las alertas podrían ser especialmente útiles en los casos en que una persona infectada ha estado en contacto con extraños, por ejemplo, en una micro, tren o en la fila del supermercado, ya que de otro modo no sabrían que estuvieron expuestos.
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Cómo funcionan las notificaciones
Los dispositivos iPhone y Android contienen códigos anónimos en constante cambio que hacen ping a los teléfonos cercanos a través de Bluetooth, un proceso que comienza una vez que el usuario opta por recibir las notificaciones.
Para que las notificaciones sean efectivas, los usuarios de Android deben activar Bluetooth y descargar la aplicación de notificación de COVID-19 correspondiente a su estado. En los iPhones, el sistema ya está integrado en la configuración, aunque los usuarios deben ir a las notificaciones de exposición y asegurarse de que las alertas estén activadas.
Cuando alguien que usa la función da positivo por coronavirus, obtiene un PIN de un funcionario de salud para ingresar en su teléfono. Cualquier otro teléfono que haya estado cerca en las dos semanas anteriores, generalmente dentro de los seis pies (1,8 metros) o menos, durante al menos 15 minutos, recibirá una alerta que le indicará al usuario que se ponga en cuarentena y notifique a un proveedor de salud.
Las aplicaciones evalúan su riesgo en función de la fuerza de la señal de Bluetooth (qué tan cerca estuvo de la otra persona) y la duración del contacto.
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Preguntas sobre privacidad
¿La información de las aplicaciones es anónima? Los expertos dicen que sí.
Las aplicaciones no recopilan datos sobre los usuarios o sus ubicaciones, y no hay forma de vincular los diagnósticos y alertas de COVID con nombres e identidades en los teléfonos, dijo Charlie Gischlar, un portavoz del departamento de salud de Maryland.
A diferencia de un sistema ampliamente promocionado al comienzo de la pandemia que usaba GPS, que rastrea la ubicación de una persona, el sistema Bluetooth ayuda a mantener la privacidad y el anonimato entre los usuarios.
“El hecho de que usen Bluetooth para enviar señales a otros teléfonos cercanos, en lugar de rastrear la ubicación, los hace menos invasivos, y la gente no debería preocuparse de que se rastree su ubicación, no es así”, dijo Steve Waters, fundador de Contrace Public Health Corps, que brinda orientación sobre el rastreo de contactos COVID-19.
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“El proceso es completamente anónimo y no recopila ninguna información de identificación personal, lo que responde a las preocupaciones de privacidad sobre las anteriores aplicaciones de rastreo de contactos más invasivas”.
Las versiones anteriores que provocaron preocupaciones sobre la privacidad fueron creadas por desarrolladores externos. Esta tecnología de alerta de notificación de coronavirus es proporcionada por Apple y Google, y los usuarios pueden optar por no usarla en cualquier momento, dijo Gischlar.
Las alertas pueden reducir las infecciones de COVID-19
Cuantas más personas se suscriban a las alertas, más eficaces serán. En este momento, solo un pequeño porcentaje de los aproximadamente 100 millones de estadounidenses que viven en los 15 estados usan las aplicaciones.
Pero los funcionarios de salud dicen que incluso estos mínimos números están marcando la diferencia. En Colorado, los funcionarios citaron estudios que muestran que incluso un uso del 15% de las tecnologías de notificación de exposición conduce a una disminución significativa de las infecciones y muertes por coronavirus. El estado dice que el uso de su aplicación ahora es del 17%.
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Algunos estados se han agrupado para habilitar notificaciones emergentes a través de las fronteras estatales, según Tony Anscombe, un experto global de la empresa de seguridad de Internet ESET. Esto es especialmente importante en lugares cercanos a las fronteras estatales donde la gente trabaja en un estado y vive en otro.
Por ejemplo, Nueva York, Nueva Jersey, Pensilvania y Delaware han formado una alianza regional que utiliza un sistema similar que permite que sus aplicaciones funcionen a través de las fronteras estatales, dijo Anscombe.
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