(CNN) – El director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, dijo que no está entrando en pánico por la variante de Ómicron, pero que su compañía está preparando una vacuna actualizada por si se necesita una.

“Creo que estoy preocupado, pero no estoy en pánico, como dijo el presidente. Nos hemos estado preparando para un momento como ese durante los últimos meses y pienso que ahora estamos muy bien preparados para ganar esta batalla”, dijo Bourla a Anderson Cooper de CNN.

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Bourla dijo que tomará de dos a tres semanas poder evaluar completamente qué tan bien funciona la vacuna Pfizer contra Ómicron. “Dudo que los resultados sean que no nos estamos protegiendo en absoluto”, dijo Bourla.

Ya sea que la vacuna sea tan efectiva contra Ómicron como contra la variante Delta, los refuerzos deberían reducir la amenaza dramáticamente, dijo Bourla.

Pfizer ya ha comenzado a producir una vacuna COVID-19 dirigida específicamente a Ómicron, como lo ha hecho con otras variantes, dijo Bourla. “Si de hecho lo necesitamos, no perderemos el tiempo”, dijo.

La compañía había producido una vacuna formulada específicamente contra la variante Delta y otra contra la variante Beta, pero tampoco la necesitaba, porque su vacuna original funcionaba bien contra esas cepas. Si se necesita una nueva vacuna para Ómicron, Bourla dijo que se necesitarían 100 días o menos para probarla y ponerla en producción.

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“Deberíamos poder hacer la transición de la fabricación a esta nueva vacuna sin perder una sola dosis, casi una sola dosis, de la capacidad actual”, dijo Bourla.

“Todos en todo el mundo deben tener acceso a las vacunas“, dijo Bourla.

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