Para esta semana se prevén altas temperaturas para gran parte de las regiones del país, contexto bajo el cual es vital protegerse contra los rayos ultravioleta y mantenerse hidratado. Pero, ¿qué sucede con los más peludos de la casa?
Las mascotas, en especial perros y gatos, se ven expuestos a las implicancias de los días con mayor temperatura. Sacarlos a dar un paseo durante las horas de mayor exposición solar puede provocarles un golpe de calor o quemar sus patas.
Las recomendaciones son amplias y en entrevista con Perfil, la veterinaria Leila Peluso destacó la importancia de que los animales tengan sombra y agua fresca durante el día. Los dueños pueden poner botellas congeladas en sus platos para que esté fresca el mayor tiempo posible, lo cual debe ser recambiado todos los días.
Respecto al paseo de los perros, la especialista sostuvo que “en las patas ellos no tienen zapatillas y el asfalto levanta una temperatura muy, muy alta, que puede quemar sus almohadillas plantares. Lo mejor es sacarlos a pasear bien temprano a la mañana o bien tarde a la noche“.
Sobre el cuidado de los gatos, Peluso añadió que es importante mantener frescos los espacios de la casa, y si se quedan solos en casa, dejarlos “con las ventanas abiertas para que circule el aire”.
Síntomas para estar alerta y cómo enfrentarlos
Uno de los episodios más críticos que puede enfrentar una mascota es un golpe de calor. Especialistas señalan que uno de los primeros signos es que el animal está inquieto, jadea o deambula por la casa de forma poco usual.
También, el animal puede presentar humedad por la transpiración al tocar sus almohadillas digitales o la encía roja y seca. Esto puede desencadenar en desmayos o convulsiones.
La veterinaria Julia Porciel, explica al medio señalado que lo mejor que se puede hacer en esos casos es “mojarlos inmediatamente con agua fresca, ni fría ni helada, porque les puede provocar un shock térmico”.
Por último, destaca que es importante refrescar a perros y gatos en la zona de las “axilas y panza”, darles agua y ponerlos en la sombra junto a un ventilador si es posible. Si aun así el animal no mejora, es vital dirigirse al médico veterinario de confianza.
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