Denuncian sobreprecio en mascarillas compradas por hospital público (03:21)
Expertos de todo el mundo han indicado en varias ocasiones que es necesario seguir utilizando mascarillas para no contagiarse, o contagiar, de COVID-19 a más personas.
La medida, en conjunto con el distanciamiento social y el constante lavado de manos representa un efectivo plan de acción contra el virus, en el cual ahora con la administración de vacunas han bajado los niveles de contagio en el mundo.
Lee también: Científicos fabrican un implante de retina que entrega una visión artificial a quienes padecen ceguera
Es por ello que los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos realizó un estudio donde reafirmó el rol clave del uso de mascarillas en la reducción de contagios.
Además, en un segundo informe, recomiendan que las personas utilicen dos mascarillas para frenar la propagación del virus.
Los resultados de la CDC, analizando a dos personas separadas por casi dos metros indicó que:
- Utilizar una mascarilla quirúrgica o de tela, bloquea casi un 40% de las partículas.
- Utilizar una máscara de tela sobre una quirúrgica, bloqueo alrededor del 80% de las partículas.
- Si ambas personas utilizan doble mascarilla, bloquean el 95% de las partículas.
Lee también: Científicos crean una nueva estrategia de terapia contra el cáncer de ovario
Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de California, indican que las mascarillas de tres capas son más efectivas para evitar que las gotas grandes de la tos o las pequeñas gotas de un estornudo no penetren a tres de la máscaras.
El profesor de Ingeniería Mecánica y Espacial de la Universidad de California y co-autor del estudio, Abhishek Saha indicó que usaron “un generador especial para producir una gota de movimiento relativamente rápido. Luego se dejó que la gota aterrizara en un trozo de material de máscara”, el trayecto fue grabado por una cámara de alta velocidad para ver qué ocurre con la gota.
Los resultados del estudio fueron publicados en la revista Science Advances.
Deja tu comentario