Estudio revela preocupante vínculo entre bebidas “sin azúcar” y problemas cardíacos

Un nuevo estudio realizado por investigadores en China y publicado en Aha Journals, reveló una preocupante conexión entre el consumo de bebidas endulzadas artificialmente y un aumento del riesgo de desarrollar fibrilación auricular, un tipo de ritmo cardíaco irregular potencialmente peligroso.

Según el estudio, aquellos que consumen más de dos litros de refrescos de dieta u otras bebidas endulzadas artificialmente a la semana pueden enfrentar un aumento del 20% en el riesgo de fibrilación auricular en comparación con aquellos que no consumen ninguna de estas bebidas.

La fibrilación auricular, también conocida como “A-fib”, es una condición en la que las cámaras superiores del corazón laten de manera caótica, en lugar de manera organizada. Los síntomas de la A-fib incluyen fatiga, falta de aire y palpitaciones.

El Dr. Theodore Maglione, cardiólogo especializado en enfermedades cardiovasculares y arritmias cardíacas, señaló para The Guardian que mientras que algunos factores de riesgo para la A-fib son genéticos o inevitables, otros pueden ser modificados. Factores como la presión arterial alta, la obesidad y la nutrición juegan un papel importante en la prevención de esta condición.

El estudio también descubrió que el consumo de bebidas con azúcar añadido aumentaba el riesgo de A-fib en un 10%, mientras que beber aproximadamente cuatro onzas de jugos puros sin azúcar reducía el riesgo de la afección en un 8%.

Penny Kris-Etherton, profesora de ciencias nutricionales en la Universidad Estatal de Pensilvania asociada con la investigación, comentó que este estudio es el primero en informar sobre una asociación entre edulcorantes sin calorías y un mayor riesgo de fibrilación auricular.

Ante estos hallazgos, los expertos enfatizan la importancia de adoptar un estilo de vida saludable, que incluya una dieta equilibrada y ejercicio regular, para reducir el riesgo de problemas cardíacos. Además, instan a las personas a prestar atención a los síntomas de ritmo cardíaco irregular y buscar atención médica si los experimentan, ya que la intervención temprana puede ser clave para prevenir complicaciones graves como accidentes cerebrovasculares.