¿Eres hombre y disfrutas jugar Uncharted 4: A Thief’s End?, ¿u otro videojuego con escenas de violencia? Bueno, este estudio es para ti, ya que investigadores de la Universidad de Luxemburgo dicen que a aquellos que amen este tipo de videojuegos tienen rasgos narcisistas.
El estudio en detalle
El equipo examinó la relación entre tipos de personalidad maquiavélicas, narcisistas y psicopatía, y las respuestas psicofisiológicas de los individuos al jugar videojuegos violentos, específicamente utilizando la sección violenta de Uncharted 4: A Thief’s End.
Contrario a algunas preocupaciones previas, los resultados sugieren que jugar videojuegos violentos no está directamente vinculado al aumento de la agresión. Más bien, se revela una conexión interesante entre la personalidad maquiavélica y las respuestas de estrés y cortisol ante contenido violento.
El estudio reclutó aleatoriamente a 54 hombres de 18 a 60 años, asignándoles al azar para jugar una sección violenta o no violenta del videojuego.
Se tomaron muestras de saliva antes, durante y después de jugar para evaluar los niveles hormonales, especialmente cortisol y testosterona. Además, se administró una prueba de “cognición agresiva” para evaluar cualquier cambio en la agresividad percibida.
Contrario a las expectativas, los participantes que jugaron la sección violenta del videojuego mostraron disminuciones significativas en los niveles de cortisol, sin aumento en la testosterona ni en la cognición agresiva. Este hallazgo desafía teorías anteriores que sugieren que los juegos violentos inducen respuestas de “lucha o huida” aumentando las hormonas de agresión.
Estos individuos, que buscan afirmar el control y la dominación, parecen encontrar en los juegos violentos una vía para satisfacer su necesidad de poder.
Los investigadores sugieren que las personas con altos niveles de aquellos rasgos mencionados tienen un deseo intrínseco de afirmar el control, y jugar la sección violenta del juego les brindó la oportunidad de hacerlo, reduciendo así su estrés. En contraste, estos individuos se estresaron más al jugar la sección no violenta.
La investgación fue publicada en la revista Physiology & Behavior y contribuye al creciente cuerpo de evidencia que busca comprender la compleja interacción entre la psicología humana y los videojuegos.
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