En una historia que parece sacada de una película de suspenso, médicos rusos han hecho un descubrimiento impactante.

En el cerebro de una mujer de 80 años el equipo médico encontró una aguja de 2,5 centímetros de largo. Lo más asombroso es que esta aguja estuvo en su cerebro desde el momento de su nacimiento en 1943.

La aguja fue hallada en el lóbulo parietal izquierdo de la mujer, por lo que creen que sus padres intentaron matarla cuando era bebé. Ya que en tiempos de guerra y hambruna, en una acción desesperada los padres recurrían a insertar agujas en el punto blando de la cabeza de los recién nacidos, específicamente en su mollera, punto del cráneo que aún se mantiene abierto al nacer.

Este acto desgarrador oscurecería la aguja en la fontanela, causando la muerte del bebé. Sin embargo, esta mujer sobrevivió al intento de infanticidio sin experimentar dolores de cabeza ni problemas de salud relacionados con la aguja en su cerebro.

A pesar de la presencia de este objeto extraño, los médicos decidieron no retirar la aguja debido al potencial riesgo potencial que conlleva la cirugía, según detalla The Guardian. Sin embargo, la mujer se mantiene en vigilancia y su salud no se encuentra en peligro.

Esta historia inusual arroja luz sobre una época pasada marcada por la desesperación y la lucha por la supervivencia, y nos recuerda la asombrosa capacidad del cuerpo humano para adaptarse y sobrevivir a circunstancias extremas.

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