Investigadores de la Universidad de Verona en Italia han realizado un estudio que podría abrir un nuevo camino en la búsqueda de tratamientos para combatir la enfermedad de Alzheimer: tomar café espresso.
El estudio sugiere que tanto la cafeína como la genisteína, presentes en el café espresso, podrían tener efectos positivos en la reducción de enredos de proteínas tau, que están relacionados con el deterioro cognitivo asociado a esta enfermedad.
Si bien es necesario realizar más investigaciones en animales y humanos, este sorprendente descubrimiento ofrece nuevas esperanzas en la lucha contra el Alzheimer.
Espresso y la lucha contra el Alzheimer:
La enfermedad de Alzheimer es un trastorno neurodegenerativo que afecta a millones de personas en todo el mundo. Los investigadores han identificado dos proteínas problemáticas, tau y beta-amiloide, que causan placas y ovillos en el cerebro, deteriorando su función y conduciendo al deterioro cognitivo asociado con esta enfermedad.
Después de un ensayo clínico fallido en 2022 para reducir las acumulaciones de beta-amiloide, un estudio reciente realizado en la Universidad de Verona ha examinado el efecto del café espresso en las proteínas tau.
Los investigadores probaron un extracto completo de espresso y varios compuestos aislados presentes en el café, incluida la cafeína y la genisteína.
El estudio reveló que tanto la cafeína como la genisteína evitaban que las proteínas tau formaran hebras largas, impidiendo así que se enredaran y afectaran negativamente la función cerebral. Además, estas sustancias redujeron la toxicidad de las proteínas y evitaron que actuaran como “semillas” para propagarse a otras células.
Perspectivas futuras
Los investigadores sugieren que los componentes del café, como la cafeína y la genisteína, pueden cruzar la barrera hematoencefálica, llegando al cerebro y actuando como moduladores de la agregación y toxicidad de las proteínas tau. Aunque el estudio se realizó en células vivas en placas de laboratorio, se espera que estas moléculas bioactivas también puedan tener efectos beneficiosos en el cerebro humano.
Si bien este estudio ha arrojado resultados prometedores, se necesita más investigación para confirmar si los efectos observados se trasladarán a estudios en animales y, en última instancia, en seres humanos. Sin embargo, este descubrimiento ofrece nuevas esperanzas en la búsqueda de tratamientos efectivos para combatir la enfermedad de Alzheimer.
Es importante destacar que, hasta que se disponga de resultados sólidos de estudios en humanos, es crucial no considerar el espresso o el café como un tratamiento médico para el Alzheimer.
El estudio fue publicado en la revista Journal of Agricultural and Food Chemistry.
Deja tu comentario