(CNN) – China se está preparando para analizar decenas de miles de muestras de bancos de sangre de la ciudad de Wuhan como parte de una investigación sobre los orígenes del COVID-19, según un funcionario chino. La medida se produce en medio de crecientes pedidos de transparencia sobre la aparición del virus.
El panel de investigadores de la Organización Mundial de la Salud señaló en febrero el almacenamiento de hasta 200 mil muestras, incluidas las de los últimos meses de 2019, como una posible fuente de información clave que podría ayudar a determinar cuándo y dónde cruzó el virus por primera vez a los humanos.
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Las muestras se guardan en el banco de sangre de Wuhan y se cree que abarcarán 2019, proporcionando muestras de tejido en tiempo real de una amplia franja de la población en la ciudad china donde se cree que el SARS-CoV-2 infectó por primera vez a humanos.
Las muestras del banco de sangre se han retenido durante dos años, han dicho funcionarios chinos, en caso de que sean necesarias como prueba en cualquier juicio relacionado con las donaciones de sangre de las que proceden.
Ese período de espera de dos años expirará pronto para los meses clave de octubre y noviembre de 2019, cuando la mayoría de los expertos creen que el virus podría haber infectado a los humanos por primera vez. Un funcionario de la Comisión Nacional de Salud de China le dijo a CNN que la preparación para las pruebas está actualmente en marcha.
“Esto proporciona lo más cercano en el mundo que hemos visto de muestras en tiempo real para ayudarnos a comprender el momento del brote”, manifestó Yanzhong Huang, investigador principal de salud global en el Consejo de Relaciones Exteriores.
Las muestras “contendrán absolutamente pistas vitales“, dijo Maureen Miller, profesora asociada de epidemiología en la Universidad de Columbia, quien instó a China a permitir que expertos extranjeros observen el proceso. “Nadie creerá los resultados a menos que haya al menos observadores calificados”.
El jefe del equipo chino que trabaja en la investigación de la OMS, Liang Wannian, sostuvo por primera vez en una conferencia de prensa de julio que China examinaría las muestras, y agregó que una vez que los expertos chinos “tengan los resultados, los entregarán tanto a los equipos de expertos del país como a los extranjeros“.
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Las muestras, si se almacenan correctamente, podrían contener signos cruciales de los primeros anticuerpos producidos por humanos contra la enfermedad, dijeron los expertos.
Liang manifestó en julio que, si bien el primer caso reportado fue en Wuhan el 8 de diciembre, “nuestra investigación y los trabajos de previos relacionados de científicos chinos sugieren completamente que el del 8 de diciembre probablemente no sea el caso inicial. Podría haber otros que ocurrieron antes”.
El Dr. William Schaffner, de la división de enfermedades infecciosas del Departamento de Medicina de la Universidad de Vanderbilt, señaló que las muestras presentaban una “oportunidad fascinante”. “A uno le gustaría volver para averiguar exactamente durante qué meses este virus comenzó a dejar huellas en la población humana en China”.
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