Una de las mayores interrogantes que ha dejado la pandemia de COVID es si las personas infectadas presentan más riesgo de padecer afecciones al corazón en un mediano o largo plazo. Por ello, investigadores de la Universidad de La Frontera (UFRO), junto con la Universidad de Magallanes y la Fundación Arturo López Pérez, decidieron estudiar a más de 400 voluntarios de entre 30 y 70 años, provenientes de Punta Arenas, Santiago y Temuco.
La investigación, que es una de las primeras de este tipo a nivel nacional, se prolongará por cerca de un año y medio. En paralelo se hará un seguimiento a igual número de personas que todavía no se han infectado con el coronavirus.
Según detalla el doctor Álvaro Cerda, investigador de la Facultad de Medicina de la UFRO y director del proyecto, el objetivo es identificar el potencial de riesgo cardiovascular a partir de la manifestación de señales tempranas que pueden llevar a patologías como diabetes y que a su vez son precursoras de las enfermedades cardiovasculares.
Lee también: COVID prolongado: Lo que sabemos sobre la pérdida del olfato y el gusto
La hipótesis de la investigación estaría relacionada con los mecanismos de acción para penetrar a las células. “El virus tiene que abrir una puerta para poder ingresar. Hay un receptor a través del cual el SarsCov2 entra a la célula y este se expresa en las células que cubren las capas de todo nuestro sistema respiratorio. Es por eso que, en primera instancia, se manifiesta como una infección respiratoria”, explicó el doctor de la UFRO.
“Nosotros nos centraremos en marcadores de resistencia a la insulina, dislipidemias (perturbaciones en el metabolismo de lípidos) y algunos marcadores inflamatorios. Todos ellos representan alteraciones metabólicas que son factores de riesgo para el desarrollo posterior de enfermedades cardiovasculares”, agregó.
Ellas están estrechamente relacionadas con un proceso llamado aterosclerosis, es decir un proceso inflamatorio crónico, que causa el estrechamiento de vasos sanguíneos. Este puede durar muchos años, y como consecuencia final puede implicar eventos cardiovasculares graves, como infarto agudo de miocardio o accidentes cerebrovasculares. Todos son consecuencia de la interrupción del flujo sanguíneo en los tejidos.
Lee también: El COVID cambió la personalidad de las personas: Adultos jóvenes son más propensos al estrés y menos confiados
Los investigadores realizan un llamado a participar de la investigación
De momento el estudio ya ha reunido más del 25% de la población requerida. Quienes quieran sumarse, pueden comunicarse al correo estudiocovid@ufrontera.cl o al WhatsApp +56 9 58531676. Luego, se agendará una visita al centro para una evaluación clínica, se toma una muestra de sangre y se hacen algunas determinaciones bioquímicas.
La evaluación, que no debería durar más de 40 minutos, se hará al comienzo y se repetirá 9 y 18 meses después. Todos los exámenes y evaluaciones serán completamente gratuitos. El doctor precisa que, aunque el objetivo inmediato es hacer un seguimiento de un año y medio, la idea es mantener el grupo de estudio por más tiempo para conseguir resultados con proyección temporal.
“Como Universidad de La Frontera hemos venido trabajando durante la última década para potenciar el alcance de nuestras investigaciones en el ámbito de la ciencia que tiene aplicación real en las personas, en este caso, en temas de salud, de modo de generar el mayor impacto posible en la sociedad”, destacó el Vicerrector de Investigación y Postgrado de UFRO, Rodrigo Navia.
Deja tu comentario