Modo karaoke activado: Cantar mejora la función cerebral y retrasa su deterioro asociado a la edad

La ciencia lo ha confirmado, cantar puede aportar grandes beneficios a nuestro cuerpo.

Cuando uno canta, se activa el sistema frontal y parietal del cerebro, estas son las encargadas de regular el comportamiento y también se utilizan más recursos motores y cognitivos asociados al control verbal y las funciones ejecutivas.

El profesor Teppo Särkämö explicó que “sabemos mucho sobre el procesamiento del habla, pero no tanto sobre el canto. Estamos estudiando el hecho de que determinadas funciones relacionadas con el canto se conservan en personas con multitud de enfermedades neurológicas”.

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Särkämö es el coordinador del proyecto PREMUS, un estudio que junto a expertos de la Universidad de Helsinki se dedican a ampliar las estrategias para ayudar a personas con afasia mediante la creación de coros.

La afasia es provocada generalmente por un accidente cerebrovascular y afecta gravemente la capacidad para comunicarse.

“En última instancia, el objetivo de nuestro trabajo con personas con afasia es utilizar el canto como herramienta para ejercitar la producción del habla y llegar en algún momento a comunicarse sin necesidad de cantar.”, detallan.

Pero, ¿cómo saben que cantar entrega beneficios?

Mediante varias resonancias magnéticas funcionales (IMRf) a personas jóvenes, de mediana edad y adultos mayores que participan en estos coros descubrieron que aquellos que cantan sufren menos cambios en la actividad cerebral del habla.

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Esto parece indicar que el canto sí tiene un efecto más global en el cerebro. Además de postularse como una herramienta de rehabilitación para personas con afasia y prevenir el deterioro cognitivo.

“Creemos que cantar puede ayudar a recuperar algunas de esas funciones, aunque dado el devastador deterioro progresivo que provoca el alzhéimer, lo único a lo que se puede aspirar es a ganar tiempo y tratar de ralentizar el ritmo del declive que ya se esté produciendo”, dicen.

Los siguientes pasos es realizar un ensayo clínico mucho más grande para ver sus aplicaciones contra el Alzheimer.